Conversamos con la actriz estadounidense, a propósito del próximo estreno de la nueve serie de Amazon, “Modern Love”, donde interpreta el papel de Lexi, una mujer con trastorno bipolar que lucha constantemente contra sus propios demonios. Además, Hathaway reflexiona acerca de su segundo embarazo y el rol de su familia en su vida, y nos cuenta cuáles son sus próximos proyectos.
Por Yenny Nun
Llega radiante a nuestra entrevista en el hotel Hilton de Beverly Hills. Luce un traje maternal de color rosa estampado con flores celestes, muy sonriente y afable como de costumbre. Es obvio que muy pronto dará a luz y que desea compartir su felicidad con todas las personas a su alrededor. Viene a promocionar un capítulo de “Modern Love”, la nueva serie de Amazon. En cada episodio de esta nueva serie, se van mostrando a distintas parejas y sus respectivas relaciones románticas.
Nuevos proyectos
¿Por qué te interesaste en esta serie?
“Modern Love” está inspirada en una columna muy popular de “The New York Times”. Antes de leer mi episodio, no estaba familiarizada con ella. El productor, director y guionista John Carney y yo hemos deseado trabajar juntos desde hace muchos años, por lo que me contactó y me envió el episodio. Lo leí y fue el “sí” más fácil que he dado en mucho tiempo. Rodamos durante ocho días en Nueva York: yo interpretando un personaje inolvidable, y él dirigiéndome en una historia iluminada con mucha verdad y música.
El show se titula “Modern Love”, y sé que estás felizmente casada desde 2012. Pero ¿cómo te sentirías saliendo a una cita en el mundo actual?
Creo que lo disfrutaría, aunque a veces no lo creería o lo encontraría doloroso. Conozco a muchas personas que se conocieron gracias a un sitio web. Hoy es algo muy común.
¿Cómo describirías a tu personaje?
Lexi es bipolar y se imagina todo tipo de cosas. Lo que nunca imagina es que alguien le tendrá paciencia, que no se asustará, que le dará el espacio para ser ella misma y, además, la amará. Pensé que esto era algo muy hermoso e inspirador.
El estilo del episodio que protagonizas es muy original…
Lo conversamos con el director: la luz va cambiando de acuerdo con el estado de ánimo de Lexi. Alumbra fuerte cuando ella está arriba, cuando se siente en las nubes y existe magia a su alrededor. Pero, cuando se derrumba, no hay nada, cero energías. En esa etapa, el enfermo solo piensa en matarse y ni siquiera tiene la energía para hacerlo. Queríamos comunicarle al público el poco espacio que ella tiene para controlar su propia vida a pesar de que está haciendo lo mejor que puede. Desafortunadamente, la salud mental aún está muy estigmatizada. Todos conocemos a alguien que está padeciendo de algún tipo de trastorno bipolar y deberíamos saber que esa persona necesita amor y mucha paciencia. Solo espero que lleguemos a la etapa donde exista una mayor comprensión hacia ellos.
¿Crees que una persona que sufre de bipolaridad es capaz de tener una relación romántica normal con otra persona?
Antes de contestarte, quiero mencionar que muchas personas que no padecen de bipolaridad tienen dificultades para encontrar una relación estable (risas). Conozco a una persona casada con su pareja, quien tiene el desorden. El diagnóstico no es el problema. Nuestra vergüenza frente a la enfermedad mental es el problema, y decidimos si la escondemos o la mostramos. Creo que la información colectiva que podamos compartir entre todos nosotros mejorará la situación.
Hathaway, mamá por segunda vez
Me enteré de que estabas encinta no por la prensa, sino gracias a tu cuenta de Instagram, donde publicaste tu foto y un texto a través del cual compartiste la experiencia de tus dificultades para concebir, algo muy valiente de tu parte…
Bueno, no estoy segura de si lo hice por valentía. Solo traté de ser sensible con los sentimientos de otras personas que han vivido la misma experiencia. Cada vez que intentaba quedar encinta y no me resultaba, entendía, al menos a un nivel intelectual, que los embarazos de otras mujeres no estaban allí para atormentarme, aunque sentí algo parecido (risas). Me daba vergüenza sentirme así; nadie hablaba del tema, ni apoyando a las mujeres que tienen ese mismo problema… En el momento que posteé la foto mostrando mi embarazo, recordé mi experiencia pasada y pensé que habría más de una mujer sin lograr concebir que estaría mirando mi foto, y, aunque entendí que estaría feliz por mí, algo de esa foto la haría sentirse mal. Por eso decidí escribir, para decirles: “Te comprendo. No fue tan fácil para mí como parece”. Instagram hace ver la vida muy fácil, pero esa no es toda la historia. Después de que aparecieron mi foto y el texto, muchas mujeres se me acercaron para compartir sus experiencias conmigo, y estuve feliz de estar allí para ellas.
¿Y cómo te has sentido esperando a tu segundo hijo?
Mucho mejor que en mi primer embarazo.
¿Quién te ha apoyado durante estas etapas?
Mi esposo, absolutamente: él ha estado a mi lado en cada etapa del camino. Y, además, todas las mujeres que te mencioné, las cuales tuvieron la valentía de compartir sus historias conmigo después de que les conté lo que me había sucedido, algo que me había roto el corazón. Algunas de ellas me confesaron que también tuvieron dificultades para concebir, e incluso una me contó que ahora tenía cuatro hijos, lo que me permitió dejar de culparme y de culpar a mi cuerpo por tener dificultades para concebir.
¿Cuántas semanas llevas? ¿Cómo está tomando tu hijo la llegada de un hermanito?
No te voy a decir cuántas semanas me quedan por una cuestión de seguridad. No quiero ver a personas fuera de mi ventana esperando que nazca el bebé. En cuanto a Jonathan, está muy feliz, y no me ha dicho si prefiere tener un hermano o una hermana.
Cuando estás encinta, ¿haces gimnasia u otra actividad física?
Depende del embarazo. Con Jonathan, en el tercer trimestre, apenas podía pararme; me sentía muy mal, por lo que ir al gimnasio era imposible. Este embarazo es totalmente diferente. Tengo toneladas de energía, por eso me estoy ejercitando.
¿Cómo has logrado balancear tu vida personal y profesional?
No conozco a ninguna madre que no esté buscando la respuesta a esa pregunta. Creo que para cada persona es diferente. En mi caso, mi marido es un compañero fabuloso, en quien me apoyo muchísimo. He aprendido algo: si tratas que cada día sea perfecto, terminarás desilusionada y agotada. Mejor es ver el panorama a través del tiempo y preguntarse: “¿He estado equilibrada esta semana, o este mes, o este año?”. De esa manera, hay mucho más espacio para ser abiertos, para relajarnos. Todo se hace más fácil de procesar. No sé cómo lo hago. Tomo cada proyecto por separado. Y creo que tengo suerte de que fui actriz por tanto tiempo, una veterana de la industria, antes de convertirme en madre, lo que me da una mayor experiencia.
Vida sencilla
¿Crees que encontrar el verdadero amor se hace más difícil cada día?
Pienso que somos menos pacientes. Técnicamente, estamos más conectados que nunca. Por ejemplo, no nos hemos visto desde la última entrevista, pero sabías que estoy embarazada. Tenemos mucha información, pero, al mismo tiempo, no nos conectamos con nuestra propia humanidad. Entra la duda de si acaso estamos conectados entre nosotros y con nosotros mismos.
¿Qué tiene tu esposo que hace que estés tan enamorada?
Me sorprende cada día y me hace más feliz que el día anterior.
Sabemos que tu marido diseña joyas. ¿Diseñó tu anillo de compromiso?
Sí (risas).
(La actriz se casó con el actor y diseñador de joyas Adam Shulman el 29 de setiembre de 2012 en el paradisiaco Big Sur de California. El primer hijo de la pareja, Jonathan, nació el 24 de marzo de 2016. Antes, había salido con el empresario Raffaello Follieri, un estafador que terminó en la cárcel).
¿Por qué decidieron casarse?
No me habría casado si no lo hubiera pensado bastante. Me interesa crecer, y una de las cosas que amo de nuestra relación es que estamos decididos a crecer juntos, lo que creo que es una gran base para un matrimonio.
¿Te gustaría que tus hijos fueran actores?
No cuando sean pequeños. No porque sea algo malo, sino porque los horarios son demasiado estrictos para un niño, y creo que lo más maravilloso de la niñez es tener todo el tiempo del mundo. Cuando sean mayores, ellos tendrán que decidir.
Estarás criando a dos hijos de una manera muy distinta a como creciste, pues estarán rodeados de privilegio y mucha publicidad. ¿Cómo lo encararás?
Criándolos en un lugar donde no haya necesidad de publicidad. Respecto al privilegio, es un tema en el cual pienso bastante, porque creo que una de las cosas buenas que me ocurrieron es que crecí sin él. Lo principal es enseñar a mis hijos buenos modales y que entiendan que todos los individuos son personas. Hace algunos meses viajamos a Inglaterra y, cuando aterrizamos, nos estaban esperando en la pista con un Porsche que nos trasladó a la suite de un hotel de lujo, donde un mayordomo nos ofreció café y gomitas para nuestro hijo. Me di vuelta hacia Jonathan, que tiene 2 años, y le dije: “Esta no es la vida real, no es un viaje típico”. Por suerte sé lo que es normal, porque así me criaron, y trataré de hacer lo mismo con mis hijos.
¿Qué cosas consideras “normales” que no puedes hacer hoy en día?
Ir a lugares como parques de diversiones y no depender de la decencia de gente desconocida que no trata de invadir el momento.
Actriz por vocación
Cuéntanos, ¿cómo comenzaste tu carrera?
Mi primer trabajo fue en “Get Real”, una serie de TV. El director de casting ya me conocía porque también enseñaba teatro en el Barrow Group, donde yo tomaba clases de actuación. Vio mi nombre y mi rostro, me reconoció y me hizo la prueba. Tuve mucha suerte. Mi mamá siempre me decía que la suerte se da cuando la preparación se encuentra con la oportunidad. Y cuando la oportunidad se me presentó, me aseguré de transformarla en algo real, en algo concreto. Gracias a esta serie, conocí a mi manager Suzan Bymel, quien me ha representado durante 23 años. Ella fue fundamental en conseguirme el rol en “The Princess Diaries”. Ese fue mi punto de partida.
¿Cómo continúas encontrando satisfacción en tu carrera?
No tengo idea (risas). Nunca pensé que tendría un desafío mayor que con “Rachel Getting Married”, pero acá me tienes con “The Dark Knight Rises” o “Les Misérables”, donde me preparé cantando doce horas diarias. (Por su rol de Fantine, Hathaway recibió un Oscar y un Globo de Oro en 2013. La actriz también se ha destacado por sus interpretaciones en “The Devil Wears Prada”, de David Frankel, e “Interstellar”, dirigida por Christopher Nolan).
Hablando de canto, ¿a qué cantantes admiras?
Amo a Maria Callas. También me gustan Joan Sutherland, Susan Boyle y Patti LuPone.
¿Y cuáles son tus actrices favoritas?
Para mí, Meryl Streep es oro puro, platino y diamantes (risas). Amo a Cate Blanchett: creo que es extraordinaria. La vi en Sídney en la obra de teatro “Uncle Vanya”. No hay nada que ella no pueda hacer.
¿Cuál es tu próximo estreno?
Hay una cinta sin título, dirigida por Todd Haynes, que filmamos a principios de año en Cincinnati, en la que trabajo con Mark Ruffalo. Trata sobre cómo un abogado encaró a la empresa DuPont Chemicals por el uso de teflón. Yo interpreto a la esposa del abogado. Y el año pasado filmé una película en Puerto Rico titulada “The Last Thing He Wanted”, dirigida por Dee Rees, que coprotagonicé con Ben Affleck. En esa historia, interpreto a una periodista llamada Elena McMahon, quien investiga los lazos entre la administración de Reagan e Irán. Alguien trata de impedir su investigación, pero no te voy a decir quién. Y, finalmente, haré “Sesame Street”, que tiene una temática infantil.
¿Qué te agrada hacer en tu tiempo libre?
En verano, me encanta ir a la playa. Soy una chica muy sencilla. Soy feliz cuando agarro una toalla de playa con una mano y a mi hijo con la otra. Preparo una merienda y paso todo el día en la playa. También me encanta cocinar, aunque no me considero chef ni mucho menos. Me fascina preparar tortas y queques.
¿Puedes ir a la playa sin que te molesten?
Voy a una playa privada (risas). Mejor dicho, casi privada, porque no soy Julia Roberts (más risas).