Con una maniobra perfecta en los últimos segundos, la surfista peruana conquistó la categoría Sub14 en el Campeonato Sudamericano celebrado en Puerto Malabrigo.

Por Alejandro Saldaña

En un fin de semana cargado de emoción y talento juvenil, la surfista peruana Valentina Escudero consagró al Perú con la medalla de oro en la categoría Sub 14 damas del Campeonato Sudamericano de Surf, celebrado en la emblemática ola de Chicama, en Puerto Malabrigo, región La Libertad.

Con tres rondas eliminatorias superadas y una final vibrante, Escudero firmó una victoria épica al capturar, en los últimos diez segundos de su serie, una ola perfecta que surcó con un potente backside, dejando sin respuesta a sus rivales y desatando el júbilo en las gradas.

Con apenas 14 años, se convirtió en la surfista más joven de la delegación nacional en alzarse con un oro sudamericano.

Chicama, también llamada Puerto Malabrigo, es célebre por ofrecer la ola izquierda más larga del mundo, capaz de recorrer hasta 4 km cuando las condiciones óptimas se unen en su rompiente, según Surfertoday. Este icónico break ha sido reconocido desde la década de 1960, tras su “descubrimiento” por surfistas limeños y hawaianos que lo avistaron desde el aire y materializaron expediciones terrestres para surfearlo por primera vez.

En este llamativo e importante escenario, Valentina Escudero navegó con precisión y agresividad sus maniobras, demostrando dominio técnico y un espíritu competitivo. Tras superar a una argentina y una ecuatoriana en la final Sub 14, aseguró la presea dorada para el Perú con un impecable backside, aprovechando al máximo la ola que se alargó por más de un minuto bajo sus pies.

La campeona resaltó el papel clave de su equipo humano y material, ya que al ser un evento tan importante, no solo tuvo que entrenar, sino también verse en la obligación de conseguir las mejores tablas. «Mi hermano y coach, Luis Eduardo Escudero, junto a Gabrielito Vargas, coordinaron con el shaper Rodolfo Klimax la construcción de tres tablas Arakawa ‘mágicas’”, explicó Escudero según la información oficial del evento.

Chicama: más que una ola

Más allá de su renombre competitivo, Chicama es la primera rompiente protegida por ley en el mundo, amparada por un Decreto Supremo que la declaró patrimonio deportivo y natural bajo la gestión de la Federación Deportiva Nacional de Tabla (FENTA). Su ola izquierda ininterrumpida, que en días favorables no supera los 2,5 m de altura, pero sí prolonga interminables recorridos, ha convertido a este destino en un paraíso para surfistas y amantes de la aventura.

En 2012, el local Cristóbal de Col estableció un récord Guinness en Chicama al realizar 34 maniobras en 2 minutos y 20 segundos en una sola ola, demostrando la versatilidad y desafío que ofrece esta rompiente.

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