Tras recibir el Premio a la Excelencia Periodística 2025 por su crónica “Muerte en la Plaza San Martín”, el periodista Juan Aurelio Arévalo Miró Quesada comparte un momento íntimo junto a su familia, en una serie de fotografías que celebran no solo el galardón, sino una herencia periodística que atraviesa generaciones.

Por Redacción COSAS

En octubre, la Fundación Gabo y Cemex distinguieron a Juan Aurelio Arévalo Miró Quesada con el Premio a la Excelencia Periodística 2025 por su crónica “Muerte en la Plaza San Martín”, publicada en El Comercio. Hoy, Cosas presenta en exclusiva una serie de fotografías inéditas que capturan el lado más humano de ese reconocimiento.

Juan Aurelio Arévalo Miro Quesada y su familia durante la premiación en El Comercio.

Juan Aurelio Arévalo Miro Quesada y su familia durante la premiación en El Comercio.

Las imágenes muestran al periodista junto a su madre, su esposa y su hijo, en un espacio cargado de simbolismo: bajo el retrato de su abuelo, el recordado Luis Miró Quesada de la Guerra, figura emblemática del periodismo peruano. Es una escena que trasciende el instante: tres generaciones enlazadas por la palabra, la cultura y la vocación por el oficio.

También fue escogido como el periodista más influente por Encuesta Poder 2025, por segundo año consecutivo. Un año prolífico en familia.

También fue escogido como el periodista más influente por Encuesta Poder 2025, por segundo año consecutivo. Un año prolífico en familia.

El galardón reafirma la vigencia del periodismo narrativo peruano y el papel de Arévalo como una de sus voces más influyentes, reconocido, además, por segundo año consecutivo en la Encuesta del Poder 2025 de Semana Económica e Ipsos 

Más que un reconocimiento individual, este premio simboliza la continuidad de un linaje que hizo del periodismo una forma de servicio y memoria. En tiempos de ruido, la imagen de Arévalo junto a su familia recuerda que la palabra, cuando nace de la verdad, también puede ser una herencia.