En entrevista exclusiva con COSAS, Vanessa Touzard, fundadora de Cordial Barranco, cuenta cómo nació la feria que reúne más de 100 etiquetas de Sudamérica y Europa, y busca acercar al público a una nueva forma de entender el vino.
Por Alessia Carboni
Lima se prepara para celebrar Vinos Libres, la primera feria peruana dedicada exclusivamente a los vinos naturales y de baja intervención. El evento, organizado por Cordial Barranco, y promete reunir a más de cien etiquetas procedentes de Sudamérica y Europa, junto con un programa de charlas, catas y experiencias gastronómicas.

La feria se realizará en Barranco, distrito cultural y gastronómico de Lima – Perú
La iniciativa surge del interés de Vanessa Touzard por difundir en el país una cultura vínica más consciente y artesanal. “Hace más de cuatro años, cuando abrimos Cordial, ya trabajábamos con vinos naturales y sabíamos el valor que tienen para la mesa y la gastronomía”, comenta Touzard “En otros países de Sudamérica ya existen ferias dedicadas a este tipo de vinos, pero en el Perú aún no. Por eso decidimos crear Vinos Libres, porque creemos que el público peruano merece conocerlos, degustarlos y entenderlos”.
A diferencia de los vinos convencionales, los vinos naturales y de baja intervención se elaboran con mínima manipulación, sin aditivos químicos y respetando los procesos orgánicos de la tierra. Touzard explica que este enfoque busca “una conexión más directa entre quien produce y quien bebe el vino”. “Estos vinos se trabajan a mano, con cuidado, sin pesticidas ni conservantes. Eso los hace únicos, porque reflejan el lugar de donde vienen, el terruño y la intención del productor”.

Más de 100 etiquetas de Sudamérica y Europa, 10 importadores y 5 productores locales.
La feria contará con la participación de más de diez importadores locales, que representan alrededor de cuarenta bodegas internacionales de países como Argentina, Chile, Uruguay, Bolivia, España e Italia, además de cinco bodegas peruanas que han apostado por esta tendencia, entre ellas Bodega Murga, José Moquillaza, Labrador de Magollo, Viñas de los Campos y Pampas de Ica.
“El mercado del vino natural en Perú todavía es pequeño”, reconoce Touzard, “porque es un producto más costoso, ya que requiere mucho cuidado. Pero está creciendo rápido, y cada vez más productores se interesan por hacerlo”.

Un vino natural va más allá de servir una copa, es acercar a quien lo bebe al viñedo y a la mano del productor.
Según la organizadora, incluso bodegas tradicionales están comenzando a experimentar con esta filosofía. “Hay un cambio visible. Por ejemplo, una bodega que trabaja con Central está transformando su producción hacia vinos de baja intervención, y ya han recibido asesoría de enólogos argentinos. Eso demuestra que el impacto de esta tendencia es real”.
Curaduría y encuentro
La selección de las etiquetas se realizó en estrecha colaboración con los importadores locales y los propios productores. “Queríamos ofrecer diversidad, que el público pueda descubrir distintos perfiles y estilos. Una feria te da esa oportunidad: probar, comparar, entender”, señala Touzard. Además, varios de los productores extranjeros estarán presentes en esta primera edición, lo que permitirá un intercambio directo con los asistentes.

Precios especiales en botellas para los asistentes.
El evento no se limita a la degustación. También incluye un programa de charlas con especialistas nacionales e internacionales que abordarán desde la historia del vino hasta sus métodos de producción orgánica. Entre ellos destacan Pepe Moquillaza, con su ponencia Historia líquida del Perú; Juanfa Suárez, de Rocamadre, que hablará sobre el terroir y las prácticas agrícolas; el boliviano Willy Vargas, quien presentará su libro Criollas sobre las cepas autóctonas sudamericanas; y la chilena Rocío Alvarado, que explorará la herencia de los vinos patrimoniales de su país. Además, el argentino Sebastián Bisole ofrecerá una charla sobre agricultura orgánica y vinificación sustentable.

Charlas especializadas en temáticas alrededor del vino con productores nacionales e internacionales.
Gastronomía y maridaje
Fiel a la filosofía de Cordial Barranco, Vinos Libres también apuesta por una experiencia gastronómica complementaria. Participarán Cañete, reconocido por su propuesta de frutos del mar —ostras, conchas y mariscos frescos—, y Triciclo, una panadería/bistró que presentará sándwiches artesanales y productos con quesos y fiambres. A ello se suma la oferta del restaurante del Hotel Casa República. “Queremos que sea una experiencia completa, no solo una feria de cata”, subraya Touzard. “La idea es que cada visitante pueda encontrar su propio punto de conexión con el vino: desde probar algo nuevo hasta conversar con quienes lo hacen posible. Porque detrás de cada botella hay un trabajo manual y una historia”.

Rechazo al uso de pesticidas, saborizantes, estabilizantes y otros químicos industriales.
Una cultura en expansión
El auge de los vinos naturales en el Perú está recién comenzando, pero sus protagonistas confían en su potencial. Touzard destaca que esta corriente va de la mano con el desarrollo de la gastronomía local. “Así como cuidamos los insumos y las proteínas marinas, también debemos cuidar lo que bebemos. En restaurantes como Central ya se nota ese interés por las bebidas y líquidos de calidad. El vino natural acompaña ese movimiento de forma orgánica”, reflexiona.
La Feria Vinos Libres se realizará en una única fecha, el sábado 15 de noviembre. Entradas disponibles en Joinnus.
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