Los diarios de Mary Jiménez
En el Perú no tenemos tradición de diarios íntimos de escritores. El más conocido es el de Julio Ramón Ribeyro, publicado como La tentación del fracaso, un título preciso para el cuentista de personajes que van a la deriva bajo el cielo gris y encapotado de Lima. El resto son diarios de exploradores extranjeros. El vacío de diarios hace pensar en la poca importancia que hemos dado al tema de la memoria.
En 1984, una directora peruana radicada en Bélgica, Mary Jiménez, estrenó el primero de sus tres diarios fílmicos: Du verbe aimer. En la película conviven el autorretrato, el diario, el cuadro familiar, el ensayo y el reportaje. Algo insólito en la América Latina de esos años, pródiga en documentales políticos y de denuncia social. Ello convertía a Mary Jiménez en una especie por clasificar.
Du verbe aimer trata sobre la madre de la cineasta y, más precisamente, sobre el despedirse de ella; Loco Lucho (1999) y Face Deal (2014) giran sobre la figura del padre. Las tres películas están construidas desde la mirada del exilio de Jiménez, que redescubre a su país –marcado por la crisis económica y el terrorismo–, y a su familia, sustentos de su sensibilidad. Cintas que están atravesadas por un sentimiento de fatalidad que empaña la historia familiar, cargada de incomprensión y conflictos, mientras aborda los temas de la enfermedad mental, la sexualidad y la impecable soledad. Treinta años separan Du verbe aimer y Face Deal. La cámara de Jiménez no solo cambia del analógico al digital, sino que los protagonistas de sus historias mutan: envejecen y mueren.
Las búsquedas temáticas y estéticas de Mary Jiménez la sitúan como pionera de una tendencia del documental contemporáneo que ha encontrado un campo fértil en el cine latinoamericano, como demuestran las obras de Yulene Olaizola (México), Renate Costa (Paraguay) y Albertina Carri (Argentina), entre otras. La retrospectiva, organizada por Transcinema Festival Internacional de Cine y el Centro Cultural de la PUCP, se llama Antropología de la intimidad: Los documentales de Mary Jiménez, y contará con la presencia de la realizadora. No hay que perdérsela.
Nada es lo que parece
The Bye Bye Man tiene un aire lejano a dos buenas películas de terror contemporáneo: Insidious, de James Wan, y The Ring, de Gore Verbinski. Y un aire cercano a una saga muy presente en el imaginario de quienes vivieron su adolescencia en los primeros años de la década de 2000, Final Destination. Dirigida por Stacy Title, trata sobre un grupo de estudiantes que se mudan a una casa alejada. Allí, liberan una fuerza sobrenatural con forma humana que persigue a todo aquel que descubre su nombre. Esto último recuerda, inevitablemente, al Beetlejuice, de Tim Burton, pero esta última tenía un registro grotesco y cómico distinto a lo que propone The Bye Bye Man. La crítica de Variety afirma que se trata de una película que sigue, meticulosamente, las reglas del género para después romperlas. Y ese pequeño gesto de insolencia es prometedor.
Fecha de estreno: 30 de marzo
Scarlett Johansson protagoniza Ghost in the Shell
En Under the Skin, el director Jonathan Glazer y Scarlett Johansson reinventan el arquetipo de la femme fatale en una inquietante joya localizada en los paisajes ásperos de Escocia. En Lucy, Luc Besson convierte a Johansson en una heroína con el cerebro más poderoso del mundo. La nueva incursión por los terrenos de la ciencia ficción de la actriz se llama Ghost in the Shell, adaptación de un manga cyberpunk, en la que Johansson encarnará a The Major, híbrida máquina-humano dedicada a combatir a hackers y extremistas. El teaser trailer promete un elenco atractivo compuesto por Juliette Binoche, Michael Pitt y el actor japonés Takeshi Kitano, mucha acción y carne descubierta. Creemos que el próximo paso de la actriz debería ser una película de Cronenberg. ¡Larga vida a la nueva diva del cine fantástico!
Fecha de estreno: 30 de marzo
Por Ana Carolina Quiñónez