Joe Biden enfrenta las consecuencias de su desastroso debate. Este fin de semana la presencia del presidente demócrata tuvo efectos distintos entre los donantes asistentes a los eventos de recaudación de fondos en The Hamptons, Long Island.
Por Redacción COSAS
Este fin de semana, Joe Biden encabezó dos eventos de recaudación de fondos para la campaña en la exclusiva zona The Hamptons. Tras asistir a un ceremonia conmemorativa de los disturbios en Stonewall Inn (Nueva York), Biden se preparó para tranquilizar los ánimos entre donantes y partidarios.
En la mansión de Barry Rosenstein de Westhampton beach, se celebró el primer evento de recaudación de fondos (Fuente: Reuters).
Al llegar a Westhampton Beach el sábado, Biden procedió a hablar en la residencia del multimillonario Barry Rosenstein, marcando el primero de dos eventos importantes ese día. A pesar de los llamados nacionales para que Biden renuncie luego de su debate, miembros influyentes de la comunidad de donantes demócratas de los Hamptons reafirmaron su apoyo al presidente.
El segundo evento se realizó en la casa de Avram Glazer en Easthampton, Glazer es el propietario de un equipo de la NFL (Fuente: Getty Images).
El segundo evento fue en casa de Avram Glazer, Biden y su esposa, Jill, en East Hampton. Glazer es el propietario del equipo de fútbol americano Tampa Bay Buccaneers. Algunas fuentes declararon que las entradas para este evento se vendieron por 100.000 dólares cada una.
La posibilidad cada vez más alta de un segundo mandato de Donald Trump aseguró una alta asistencia a ambos eventos. Sin embargo, las opiniones entre los asistentes estuvieron divididas. Según un veterano político entrevistado por Page Six tuvo efectos contradictorios. Aunque muchos se sintieron tranquilos por la presencia de Biden, otros permanecieron escépticos y describieron su esfuerzo como «poner una curita en una herida de bala», según señala dicha fuente.
Biden intento mejorar los ánimos tras un debate lamentable (Fuente: Getty Images).
A pesar del ruido, el bando de Biden se mantiene decidido. “Por supuesto que no abandonará”, insistieron los portavoces de Biden en una serie de mensajes de texto a los periodistas. Desde el debate, se han sugerido diversos nombres como Kamala Harris y Pete Buttigieg para reemplazar a Biden. Pese a las diferentes especulaciones, el Partido Demócrata no se ha pronunciado oficialmente.
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