Jennifer López y Ben Affleck ya no se hablan. Un contacto cercano a la pareja reveló que han entrado a una fase de contacto cero. Esta medida parece haber retrasado sus planes de divorcio.
Por Revista COSAS
En medio de rumores persistentes de divorcio, Jennifer Lopez y Ben Affleck han llegado a un punto crítico en su relación. La famosa pareja, que se casó en julio de 2022, ya no se habla ni en persona ni por teléfono. Esta fase de no contacto ha retrasado sus planes de divorcio, lo que aumenta las especulaciones sobre el fin de su matrimonio.
Un contacto cercano a la pareja declaró que no se hablan ni en persona ni por teléfono.
Los movimientos inmobiliarios
Uno de los mayores obstáculos en su separación es la división de su impresionante mansión de $68 millones en Beverly Hills. Esta propiedad de 38,000 pies cuadrados, que cuenta con 12 dormitorios y 24 baños, ha estado en el mercado desde junio. Aunque inicialmente intentaron venderla de manera privada, ahora han decidido hacerla pública. La urgencia por venderla se ha hecho evidente, ya que ambos están ansiosos por cerrar este capítulo.
Mientras su mansión conjunta sigue en el mercado, ambos han avanzado en sus transacciones inmobiliarias por separado. Ben Affleck compró una lujosa mansión de $20.5 millones en el exclusivo barrio de Pacific Palisades, cerrando el trato el mismo día que JLo celebraba su 55 cumpleaños. Por su parte, Lopez vendió su condominio en Nueva York el 24 de julio, el mismo día que Affleck finalizó la compra de su nueva propiedad.
Ambos tienen una mansión de $68 millones en Beverly Hills que están tratando de vender.
Verano en costas opuestas
Este verano, la distancia entre ellos ha sido más notoria que nunca. Mientras Lopez disfrutaba de su ostentosa fiesta de cumpleaños en los Hamptons, Affleck se quedó en Los Ángeles. Incluso en su segundo aniversario de bodas, el 16 de julio, la pareja estuvo separada, aumentando los rumores sobre la inminente disolución de su matrimonio.
En su segundo aniversario de bodas, el 16 de julio, Affleck estuvo en Los Ángeles, mientras que López se quedaba en Nueva York.
Un divorcio sin abogados
A pesar de todos estos movimientos, Lopez y Affleck no han contratado abogados de divorcio. En lugar de eso, han delegado la tarea de manejar los detalles de su separación a sus gestores comerciales. Este enfoque ha retrasado aún más el proceso, pero parece ser una estrategia para minimizar los conflictos y resolver las cuestiones financieras de manera más eficiente.
La pareja no ha contratado abogados para el divorcio. Son sus gestores comerciales quienes están a cargo.
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