Las nupcias entre Anant Ambani y Radhika Merchant han sido catalogadas como la boda del siglo. Su organizador comenta al respecto.

Por: Redacción Cosas

Preston Bailey, el organizador de eventos para las estrellas y la realeza, es el artífice de la boda del siglo. Ahora, revela los detalles de la organización del matrimonio más lujoso, una celebración que marcó un hito en la historia de los eventos sociales.


La boda de Anant Ambani, hijo  del hombre más rico de la India, y Radhika Merchant, fue una extravagancia de 600 millones de libras que reunió a una exclusiva lista de invitados. Era la cúspide de la élite. Con la presencia de figuras reconocidas desde los Blair, los Rothschild hasta estrellas de Bollywood y Hollywood, este evento atrajo la atención mundial. A pesar de ello, el hombre con la visión más privilegiada fue el organizador de eventos Preston Bailey.

Declaraciones del wedding planner

¿Cómo se organiza una boda de esta magnitud? Según Preston, todo comenzó solo tres meses antes del gran día, cuando Nita Ambani, madre del novio, lo contactó. Conocida por su atención al detalle y extravagancia, Nita sabía que Bailey era el indicado para llevar a cabo su visión, famosa por sus espectaculares arreglos florales. Bailey no decepcionó: sus decoraciones, con millones de flores y esculturas florales, que incluían jirafas, leopardos de las nieves, monos, tigres, e incluso una réplica botánica de los perros de la pareja; fueron el centro de atención.

El punto culminante fueron los elefantes mecanizados que movían sus trompas, la creación más compleja, según Bailey. Nita Ambani supervisó cada detalle del evento, y Bailey la describió como «el genio de los acontecimientos». Este no era su primer desafío, ya había organizado las bodas de sus dos hijos mayores, demostrando su destreza en eventos de gran magnitud.

La magnitud del evento

Bailey, conocido por hacer realidad lo imposible, ya había creado arreglos memorables para bodas como la de Serena Williams y Alexis Ohanian y la de Catherine Zeta-Jones y Michael Douglas. Sin embargo, pocas bodas han igualado la opulencia de la de Ambani. La celebración, que culminó en una recepción con más de 14,000 invitados, incluyó una serie de ceremonias tradicionales como el sangeet (la preparación de la novia), poojas (oraciones ceremoniales), mehendi  (donde los novios se adornan las manos con henna) y haldi (tradición en la que los novios se cubren con pasta de cúrcuma, que simboliza la prosperidad), cada una marcada por un lujo sin igual. La novia, en un corsé de filigrana dorada de Dolce & Gabbana y un sari de Anamika Khanna, deslumbró en su gran día.

El después de la boda

Después de tres días de festividades valorizadas en 600 millones de dólares, lo cual es una suma insignificante para Mukesh Ambani, los recién casados se retiraron a su villa millonaria en el Palm Jumeirah de Dubái. Ahora disfrutan de su nueva vida juntos, mientras se recuperan del cansancio de las celebraciones.

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