Propuesto por Francisco en 2024 y respaldado por su sucesor, el plan convertiría al Vaticano en uno de los pocos países 100% renovables.

Por Redacción COSAS

El Vaticano podría sumarse pronto al reducido grupo de países que generan toda su electricidad a partir de fuentes renovables. El Papa León XIV impulsa la construcción de un parque solar en un terreno al norte de Roma, diseñado para abastecer la totalidad del consumo energético del Estado de la Ciudad del Vaticano.

La propuesta fue presentada en 2024 por el papa Francisco y aprobada por el gobierno italiano. León la respaldó apenas semanas después de sucederlo, calificándola como “un ejemplo para el mundo”. “Todos conocemos los efectos del cambio climático y es necesario cuidar de verdad todo el mundo, toda la creación”, afirmó el pontífice en junio, durante una visita al lugar. El proyecto aún necesita la aprobación del Parlamento italiano.

De concretarse, el Estado más pequeño del mundo, con apenas 0,44 km², se convertiría en el octavo país —uniéndose a un reducido grupo de estados— que depende por completo de energías limpias. Más allá de lo simbólico, medidas como paneles solares en los techos del Vaticano o un papamóvil eléctrico siguen la visión de la encíclica Laudato Si’, donde Francisco advirtió que la degradación ambiental, impulsada por intereses económicos de corto plazo, agrava las desigualdades globales y causa sufrimiento a los más vulnerables.

En 2024, el Papa Francisco encargó la construcción de una planta agrivoltaica para contribuir al sustento energético en el Estado de la Ciudad del Vaticano.

El papa León, un campeón climático

La llegada de León XIV al papado lo ha perfilado como uno de los líderes mundiales más comprometidos con la causa ambiental, en línea —o incluso con mayor impulso— que su predecesor. Ha introducido la llamada “misa verde” o Misa por el Cuidado de la Creación, que ofició por primera vez en el Centro Laudato Si’ de Castel Gandolfo. “Debemos rezar por la conversión de tantas personas, dentro y fuera de la Iglesia, que aún no reconocen la urgencia de cuidar nuestra casa común”, dijo vestido con una túnica esmeralda. “Vemos tantas catástrofes naturales en el mundo, casi todos los días y en tantos países, que en parte son causadas por los excesos de nuestra condición humana y nuestro estilo de vida”.

Algunos críticos católicos creen que esta misa no va lo suficientemente lejos, y su continuidad con las posturas progresistas de Francisco, incluido el apoyo a migrantes, genera incomodidad entre sectores conservadores de la Iglesia. Sin embargo, sus posturas coinciden con la mayoría de los católicos: un 72 % en EE. UU. considera que la justicia ambiental requiere atención urgente, según un estudio de 2023 de la Universidad de Georgetown.

El Papa León XIV se perfila como el defensor del clima que el mundo necesita.

La adhesión de León al mensaje ambiental de Francisco llega en medio de olas de calor que este verano azotan Italia y Europa, incendios forestales, inundaciones y récords de temperatura en todo el mundo. En un momento en que algunos países retroceden en sus compromisos climáticos, la voz del papa resuena como un contrapeso y un recordatorio de que, para él, cuidar de la creación es un deber moral y global.

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