Habitar el cuerpo

El evento de arquitectura, interiorismo y decoración más destacado de la región reabrirá sus puertas del 23 de mayo al 2 de julio, nuevamente en la espléndida Casa Majluf. Como cada año, aquí convergerán arte, tecnología, responsabilidad social y sostenibilidad. Verónica Torres de Haaker, una de las organizadoras de CASACOR, adelanta novedades de la nueva y esperada edición.

Por: Laura Gonzales

Una casa nunca termina de “hacerse”; está en constante evolución, ya que sus habitantes se mantienen en permanente búsqueda de “su sitio”, ese espacio que funge como segundo carné de identidad, el refugio que acoge y abraza al final del día. Más aún si, como sucedió en la pandemia, es menester permanecer dentro prácticamente todo el día.

Verónica Torres de Haaker y Elena Benavides en plenas labores de preparación para lo que será la nueva edición de la renombrada y esperada feria de diseño y arquitectura. La Casa Majluf es, hoy, un lienzo en blanco.

Precisamente, ayudar a las personas a encontrar, diseñar, repensar o, incluso, solo a reflexionar sobre su espacio es una de las principales razones por las cuales arquitectos, diseñadores de interiores, paisajistas, decoradores, artesanos y un largo etcétera entregan sus mejores propuestas en CASACOR. Así ha sido desde 1996, cuando Verónica Torres de Haaker y las hermanas Elena y Anita Benavides se animaron a traer la franquicia al Perú. En un momento en que el diseño de interiores era considerado un servicio de lujo, la mentalidad debía cambiar; y esto se ha logrado poco a poco. Hoy, el público de CASACOR es cada vez más diverso y atrae el interés del público general hacia el fascinante mundo del diseño.

A lo largo de sus veintiséis años, la feria ha intervenido treinta y dos inmuebles, entre casonas, palacios y edificios en Lima y Callao, y se han puesto en valor propiedades consideradas patrimonio histórico. Como vocera del evento, Verónica Torres de Haaker anuncia
planes y novedades para lo que viene este año.

En la última edición de CASACOR se presentaron cuatro espacios en diez mil metros cuadrados, cada uno con peculiares ambientes. ¿Cómo piensan reinventarse este año?

Como bien dice, el evento se desarrolló en un gran terreno que abarcó cuatro viviendas que dialogaban entre sí. Este año estamos trabajando para que la intercomunicación sea aún más perceptible, con más caminos y menos paredes limítrofes, sin sacrificar el paisaje exterior que las conecta. Los proyectos exteriores serán una sorpresa; además, los jardines se renovarán expresamente.

Esto último remite a un tópico muy importante en estos tiempos, indesligable de cada iniciativa: hacer hincapié en la ecología.
Así es. Tenemos a nuestro favor que el inmueble de por sí cuenta con abundante vegetación natural, iluminación y espacios de paisajismo. Pero, además, para motivar a los participantes, estamos creando el premio al proyecto más sostenible.

Uno de los grandes aciertos del evento, el año pasado, fueron las pantallas para personas con discapacidad auditiva.
La inclusión está en los principios de CASACOR. Gracias al apoyo de Samsung, cada casa contó con una pantalla informativa, algo que sorprendió a todo el público. Es una maravilla que sensibiliza a las personas que tienen la oportunidad de apreciarlas, así que continuaremos en esa línea. Asimismo, nos seguiremos preocupando –como tiene que ser– por la accesibilidad para los visitantes que llegan en silla de ruedas, quienes contarán con el apoyo de un representante de CASACOR durante su recorrido, previa coordinación con la organización.

¿Cuál será la temática sobre la que girarán los proyectos este año?
La temática es “Cuerpo y Morada”. Esto nos remite a que debemos cuidar nuestra vivienda como si fuera nuestro cuerpo, evitando que se enferme o deteriore. A la vez, nos lleva a reflexionar sobre la importancia del autocuidado: así como el cuerpo, la casa la aseamos permanentemente, la limpiamos, embellecemos, aromatizamos, calentamos, etcétera.

Prácticamente, desde que la franquicia llegó al Perú, se la conoció como una “vitrina para todos”. ¿A qué se debe esto?
A que creemos en los talentos nuevos, jóvenes, a quienes les abrimos las puertas y les damos oportunidades para que se expresen artísticamente y muestren toda su creatividad durante las
cinco semanas que dura CASACOR.

Pasado y presente: tanto en las ediciones anteriores, con sede en otras majestuosas edificaciones de la ciudad, como en la última (2022), se mantienen el estilo y el buen gusto.

Finalmente, ¿qué expectativas tienen en consonancia con los
tiempos que vivimos?
Estamos, como siempre, optimistas. Esta es una muy buena oportunidad de ver en persona las últimas tendencias para luego “rejuvenecer” los ambientes de la casa. Se presentarán las últimas novedades en materiales y tecnología que se encuentran en el mercado local. En definitiva, no se puede dejar de venir a ver espacios bien logrados por profesionales de primer nivel.

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