Se denomina centibillonario a aquella persona cuya fortuna es superior a los cien mil millones de dólares. Actualmente, solo dos personas en el mundo han superado dicha cifra: Jeff Bezos y Bill Gates, los magnates de la tecnología.
En el mundo existen, aproximadamente, unos 2800 multimillonarios. De ellos, 145 tiene un patrimonio superior a los US$ 10 mil millones, lo que los convierten en decamultimillonarios. Pero ahora existe una nueva categoría y por primera vez en la historia hay dos centimultimillonarios a la vez.
De acuerdo con el índice de multimillonarios de Bloomberg, un ranking diario que se actualiza con el cierre de cada jornada bursátil en Nueva York, Jeff Bezos posee 146 billones de dólares mientras que el fundador de Microsoft, Bill Gates, ha superado recientemente el umbral de los 100 mil millones. Este repunte no se debe tanto al crecimiento de su empresa sino a sus certeros movimientos en la Bolsa de Valores.
Los más poderosos
Según el diario británico The Times, la fortuna conjunta de los señores Bezos y Gates supera el PBI nominal de 143 países. Para ser exactos, se situaría entre Egipto (249,7 mil millones) y la República Checa (244,5 mil millones). Dichas cifras acentúan la brecha de riqueza en EE.UU., donde los que más adinerados acumulan más poder a una velocidad vertiginosa.
Por otro lado, el tercer lugar entre los más acaudalados del mundo se encuentra el propietario del grupo de empresas de lujo LVMH, Bernard Arnault con US$ 84,3 mil millones. En la cuarta posición está el inversor estadounidense Warren Buffett con US$ 82,6 millones de dólares. Completa la lista de los cinco más poderosos el español Amancio Ortega, quien presume un capital de US$ 67,1 mil millones.
Nada dura para siempre
Pero, incluso, las megafortunas de Gates y Bezos tienen fecha de caducidad. El que fuera por años el hombre más rico del mundo ha donado más de US$ 35 mil millones a la fundación Bill & Melinda Gates y tiene la intención de regalar la mitad de su patrimonio.
El fundador de Amazon, entre tanto, se encuentra a punto de ceder buena parte de su fortuna a raíz de su sonado divorcio, tras veinticinco años de matrimonio.