Al final del año, quedan los mejores álbumes, no los más escuchados ni los más comerciales, sino la lista donde se encuentran tan solo los artistas y las canciones que han demostrado ser más que solo la suma entre un micrófono y unos arreglos musicales.
Por Raúl Cachay A.
En el plano local, no es casual que el escapismo etéreo que proponen actos eminentemente electrónicos como Laikamorí y Theremyn_4 ocupen los primeros lugares de nuestra lista de los mejores discos del 2018.
Este año también consistió en dejarse llevar por la música. Por un lado, desde el enigma que encubren sus máscaras, el dúo Laikamorí supo transportarnos a parajes sonoros mucho más acogedores que lo que podía ofrecernos la realidad circundante y eso, en tiempos como estos, es algo que debemos agradecer. Catarsis. La música como burbuja y válvula de escape. Como la que emana de la versatilidad y la experiencia de José Gallo, factótum de Theremyn_4, que con “Lost Moments” ha alcanzado algo parecido a la cumbre de una ya de por sí excelente discografía.
El formidable “Los cielos vuelan otra vez”, de Catervas, parece seguir una trayectoria elíptica al remontarnos al sonido más cercano al dream pop de sus primeras grabaciones, pero paradójicamente no deja de ser un paso adelante en la trayectoria de una banda independiente que ya se aseguró un lugar entre las más trascendentes y perdurables de las dos últimas décadas en la escena local.
Desde los nebulosos ámbitos del post punk y el synthpop, es imposible no destacar la excelencia de la banda FELYNO, originaria de Cerro de Pasco, y su sorprendente “Graciano Riccci”; y del dúo limeño Blue Velvet, que alimentó las fantasías de los parroquianos de Nébula y Kong con “In Event of Moon Disaster”, una más que satisfactoria ópera prima.
Finalmente, el jovencísimo cantautor Fabricio Robles editó uno de los álbumes más delicados y evocativos del último año, Ale Hop probó que se mantiene a la vanguardia entre los alquimistas locales del estudio de grabación con “Bodiless” y Los Protones mantuvieron un pie (o un pedal) en el pasado y otro en el presente con el adictivo “Misión OA4”.
Entre los que nos atraparon con la guardia baja, imposible no celebrar la aparición de una banda como Satélite Menor, que editó un EP sencillamente perfecto, con cuatro temas de raigambre ibérica y cerrado romanticismo que ya suenan en rotación pesada en el playlist mental del autor de este recuento. Y cómo no celebrar, tampoco, a una cantautora controversial, desconcertante e ingeniosa como Denisse Bulllard, que con su debut “Cachorra tierna” ha generado tantos odios como pasiones entre los prosélitos de nuestra escena.
Estos fueron nuestros 30 discos nacionales favoritos del 2018:
30. Giorgio y los Invisibles – “Monocaína»
29. Pierre Cueto – «Space Surfer»
28. Alec Marambio – “Oxímoron” (EP)
27. Dengue Dengue Dengue – “Semillero” (EP)
26. Artaud – «Cábala» (EP)
25. Daniel Quiñones – “Vientre”
24. The Underground Parties – «Will Death Let Us Scream Like Now»
23. Korea – “Algo especial”
22. 16 Bits – «El mundo acaba contigo»
21. Puppies in the Sun – “The Church of Puppies in the Sun” (EP)
y “Unheard” (EP)