El viernes 03 de junio Cristina Valentina presentará un concierto de su disco «All I Know», donde se grabará un lado B con versiones inéditas y presentará algunas canciones nuevas. El concierto contará con varios músicos invitados y toda una puesta en escena planeada junto al artista visual Malaki.
Salir de gira es colocarse bajo un lente distinto. El público es nuevo, como el lugar y como algunos de los músicos con quienes se comparte el escenario. Para Cristina, la gira que siguió al lanzamiento de su primer álbum significó ver su música adaptarse a nuevos ambientes y necesidades. El resultado son una serie de versiones inéditas y las ganas de cerrar esta etapa de forma especial.
¿Cómo nace la idea del lado B?
El año pasado estuvimos en Colombia, en el Festival Llavería, en el Culture Collide de Los Ángeles, y en CMG, en Nueva York, además de tener varias tocadas que fueron surgiendo. Me presentaba junto a David Chang en guitarra, y en algunas ocasiones se nos unían uno o dos músicos locales. Eso significó hacer arreglos en las canciones; a veces eran solo mi voz y la guitarra. De esa necesidad salió una nueva atmósfera que me gustó mucho, así que decidí documentarla.
¿Y el concierto?
El plan original era grabar las nuevas versiones e incluirlas como bonus tracks en una segunda edición del disco, porque se agotó. Me sugirieron invitar público, pero al final el estudio quedó pequeño para lo que queríamos hacer. Es el primer concierto del año donde decido dónde y con quién tocar, es diferente a solo adaptarme a un lugar que es lo que se hace normalmente. También es importante como forma de cerrar la etapa del primer disco, porque voy a sacar nuevo material bastante distinto.
¿Será un concierto diferente?
Estamos ambientando el espacio para que la atmósfera tenga que ver con el sonido. Estas versiones tienen muchas capas de audio, entonces estamos jugando con la idea de “lo líquido”, como un símil de música que te envuelve. También será todo en blanco y negro, porque son versiones más minimalistas. Como se basa en los conciertos de la gira, casi todo lo tocaremos en dúos o tríos sobre el escenario.
¿Cambia la performance tener un acompañamiento detrás?
Es más difícil, siento que tengo que entregar más, estar más presente. La primera vez que me presenté así fue en Colombia, y me ayudó porque sentía que como el público no me conocía, no tendrían con qué comparar. Cuando hemos tocado en ese formato de vuelta en Lima, sí tenía más dudas, me preguntaba si iba a gustar igual.
¿Cómo va a ser el segundo álbum?
Todavía no lo tengo definido, pero llevo ya algunos meses trabajando en canciones nuevas. El día del concierto presentaré algunas primeras versiones. Un cambio es que he empezado a componer en español. Antes me hacía sentir exagerada o que no lograba expresar lo que realmente quería decir. Con el inglés no me juzgaba tanto. El cambio vino cuando empecé a preguntarme por qué me costaba tanto. En mi idioma materno voy a tener una voz más clara y, por supuesto, estar más expuesta genera miedo.
¿Y musicalmente?
Empiezo siempre por lo musical, me planteo atmósferas, sonidos. Todo es más minimalista. Cada vez que hago algo, tengo que quitarle algo al final. Luego lo vuelvo a hacer y vuelvo a quitar. También tiene algo más de electrónica. Sonidos menos orgánicos. No todos son instrumentos reales, hay sampleo, sonidos de la ciudad o sonidos que me gustan.
El concierto será el 3 de junio en Agárrate Catalina. Estarán los músicos David Chang en la guitarra, Jose Roberto Terry en la percusión, Mario Cuba en el bajo, entre otros. La entrada incluye la descarga de las nuevas versiones.
