El gobierno chino ha comunicado que Nyima, el niño que fue elegido por el Dalai Lama como su sucesor, y que ayer cumplió 31 años, “lleva una vida normal”.  El gobierno chino arrestó a Nyima a los seis años, tras haber sido declarado “la próxima reencarnación”. Desde entonces su vida ha sido un misterio.

Por Santiago Camino

Nyima Dalai Lama

El Dalai Lama muestra una foto de Nyima. Tras nombrarlo su sucesor, secuestraron al niño de seis años.

Gedhun Choekyi Nyima, 25 años después de convertirse en el preso político más joven del mundo, es un graduado universitario con trabajo estable. Así, al menos, lo anunció ayer un portavoz del ministerio de Exteriores chino, Zhao Lijian. Nyima, que ya ha cumplido los 31, “cursó sus estudios de manera gratuita cuando era un niño. Posteriormente, se graduó de la universidad y ahora tiene un empleo”. Ni él ni sus familiares desean ser molestados. Quieren seguir viviendo “vidas normales”, añadió el representante político sin dar más detalles.

La vida de Nyima ha sido misterio desde que en 1995, cuando solo contaba con seis años de edad, fuera escogido por el Dalai Lama como la reencarnación del X panchen lama, la segunda autoridad religiosa en Tíbet. El recién nombrado XI panchen lama desapareció el 20 de mayo de ese mismo año. El ejército chino lo apresó, junto a su familia, tras el anuncio oficial.

El niño elegido y el impostor

El gobierno chino nombró entonces a otro niño, llamado Gyancain Norbu. Era una clara manipulación política. Para esto recurrieron a un método de selección empleado durante la dinastía Qing, que consiste en escribir los nombres de los candidatos en granos de cebada a introducirlos en una urna de la que se extraía solo uno. El proceso tibetano, en cambio, pasa por presentar posesiones del difunto lama a su hipotético sucesor para que este las reconozca. Este panchen lama alternativo, hijo de dos miembros del Partido, apenas cuenta con reconocimiento internacional. Pasa la mayor parte de su tiempo en Pekín sin participar de actos públicos.

Por medio de esta maniobra, el Partido aspiraba a ahondar su dominio en la región, dado que una de las funciones más importantes desempeñadas por el panchen lama es la de dirigir la búsqueda de la reencarnación del Dalai Lama tras su fallecimiento. De este modo, el gobierno chino se garantizaba la posibilidad de controlar la elección del próximo líder tibetano, asegurándose su fidelidad al Partido sin romper con la tradición budista. El dalai lama actual, de 84 años, vive como refugiado en India, adonde escapó tras la rebelión tibetana de 1959 que enfrentó al Ejército Popular de Liberación con las guerrillas locales que defendía su soberanía tras la incorporación del territorio al estado chino en 1950. El dalai lama, que en 1989 ganó el premio Nobel de la Paz por su acción política, ha negado siempre ambicionar un mayor grado de autonomía para la región.

El Dailai Lama reclama

El autoproclamado gobierno en el exilio de Tíbet, también afincado en India, ha aprovechado la efeméride para volver a preguntar por el paradero del joven lama. “La abducción del panchen lama por parte de China y el rechazo forzoso de su identidad religiosa y derecho a la práctica en su monasterio es una violación de la libertad de culto. También, una violación de los derechos humanos”, ha afirmado en un comunicado el parlamento tibetano, conocido como Kashag.

 Nyima Dalai Lama

Sin suerte, EE UU ha llamado a China a “hacer público de manera inmediata el paradero del panchen lama.

Buscando a Nyima

También ha participado de las reclamaciones Mike Pompeo, el secretario de Estado de EEUU. Pompeo emitió un comunicado llamando a China a “hacer público de manera inmediata el paradero del panchen lama y respetar su propia Constitución y los compromisos internacionales para promover la libertad de culto para todas las personas”.

El gobierno chino se ha negado en repetidas ocasiones a dar cualquier tipo de detalles acerca del paradero o la vida de Nyima. En 1996, un año después de su detención, China desoyó una petición oficial del Comité de Derechos del Niño de las Naciones Unidas. Argumentó que el niño estaba bajo riesgo de ser “secuestrado por separatistas” y que “su seguridad se había visto amenazada”.

Nyima Dalai Lama

La última vez que se supo de Nyima fue en 2007, en respuesta a una investigación del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

La última vez que se tuvieron noticias de Nyima fue en 2007. Esto, en respuesta a una investigación del Consejo de Derechos Humanos de la ONU que solicitaba la visita de un experto independiente que pudiera confirmar el bienestar del joven. China se limitó a señalar que el panchen lama “es un niño tibetano perfectamente ordinario. Goza de una excelente salud y lleva una vida normal y feliz”. La información, que ni siquiera daba respuesta a la petición de la ONU, le retrataba como un chico “simpático por naturaleza. Un buen estudiante con excelente resultados y aficionado a la cultura tradicional china”.