Nacho Vegas ha pasado de los temas intimistas a las canciones sociales, pero su calidad y su estilo siguen intactos. Este cantautor nacido en Gijón es considerado por muchos uno de los mejores letristas en español de la actualidad y este 24 de agosto se presentará en el Teatro Luigi Pirandello a propósito de Canciones populistas, su último trabajo. Conversamos con él antes de su primera visita al Perú.
¿Qué diferencias hay entre las canciones populistas y las canciones populares?
Creo que todas las canciones populistas son populares, pero no todas las canciones populares son populistas. Me refiero a que los que nos dedicamos a este oficio hacemos música popular, sin embargo lo que yo he observado es que la música popular ha ido tomando una medida elitista muy preocupante. Hace miles de años la música popular se transmitía de forma horizontal y de generación en generación… Creo que esta nueva deriva elitista se puede combatir con voluntad política y haciendo música populista. Es decir, haciendo música popular pero teniendo consciencia de que los músicos podemos elegir el compromiso de intentar devolverle a la música popular algo de la horizontalidad que debe tener para llegar a toda la gente y no sólo a una élite.
Antes solías decir que las canciones las hacías para poder acercarte a cosas que no comprendías…
En realidad, cuando escribo canciones, sean del signo que sean, yo siempre he usado como materia prima la realidad. En las canciones más íntimas, que hablan de relaciones más personales, siempre he procurado de huir de una cosa que no me gusta de la música popular que es la canción de amor romántico, porque eso es una mentira. Los amores tienen que ser reales y nosotros nos movemos en un mundo que en muchos aspectos es hostil para las cosas bonitas, como el amor y la música. Por eso mis canciones tienen ese corte dramático-trágico, porque es lo que realmente vemos.
¿Ha cambiado algo de eso con los temas que has incluido en Canciones populistas?
No, realmente no. Cuando hago canciones de un signo más social también estoy hablando de cosas que están en el aire y que ocurren. En España ocurrieron algunas cosas y lo que fui cogiendo formó parte de Resituación. En Canciones populistas hay algunas cosas que estaban en el aire y que no sabía muy bien lo que significaban. En este EP hay canciones que tienen un fin marcado, el hecho de hacer una adaptación de Phil Ochs era parte de algo que estaba construido, el hecho de hacer una canción para la PAH también es algo con un material que es conocido. El proceso es el mismo. Hay algunas cosas a nivel social que son bastante difíciles de comprender.
¿Tiene que ver con esto el hecho de haber incluido canciones en asturiano?
Yo antes ya había cantado temas en asturiano. Lo que nunca me atreví a hacer es a escribir en asturiano. Lo que hacía antes era cantar canciones y letras que ya estaban escritas pues eran canciones tradicionales. Pero es una lucha que yo siempre he tenido desde que terminé la facultad: reclamar la oficialidad de este idioma.
Tus canciones siempre están llenas de personajes. Si tú no fueses cantautor, ¿qué clase de personaje serías?
Mis canciones están llenas de personajes. Todos son reales. Y aunque los describas en tercera persona siempre hay algo de uno en ellos. Aunque luego sea gente despreciable, siempre hay algo bonito en ellos también, algo simpático que te genera cierta empatía con el personaje. Así que supongo que podría ser cualquiera de ellos.
¿Te has enterado que eres el leitmotiv de un libro que se acaba de publicar acá en Lima?
No, no…
Se llama Estrella solitaria, es de Jerónimo Pimentel, y tú eres uno de los móviles principales de la trama…
No tenía ni idea. ¿Es un libro de qué tipo…?
Es una novela corta en la que dos fanáticos tuyos van a tu encuentro… ¿Qué sientes ahora que te estás enterando?
Un poco de vergüenza (risas). Porque creo que seguramente como leitmotiv literario hay personajes más interesantes que yo… Pero también me trae ilusión. La verdad es que, siempre que me he encontrado con gente que aprecia lo que hago y para la que es importante la música que hago, ha sido muy bonito. Yo tengo la suerte de formar parte de una generación en la que no hubo demasiado dinero ni demasiada fama, que son las cosas que matan el oficio de dedicarse a la cultura popular, y siempre me he encontrado con gente muy cariñosa. Así que procuraré hacerme con el libro cuando esté por allá.
Eres más afable en las entrevistas de lo que aparentas en tus fotos. ¿Por qué pasa esto?
Supongo que en mi primera época había una estética que fomentaba en los discos una cierta impenetrabilidad. Algo que creaba una especie de aura que venía de los mitos del rock que a mí siempre me gustaron. Era una cosa que yo descubrí desde muy temprano. A mí me gustaba muchísimo leer libros sobre lo que ocurría en Londres en los sesenta y sobre figuras míticas como Gram Parsons. Y cada vez que leía esos libros me daba cuenta que eran mitos con pies de barro. Era gente muy frágil. Cosas que a veces eran bastante ridículas. En mi generación también había todo esto de «sexo, drogas y rocanrol» y era una cosa un poco ridícula. Ahora, aunque seguimos un poco relacionados con esa imagen, yo siempre procuro no tomármela demasiado en serio…
Entonces es, más que nada, un personaje creado…
Sí, me decían que había una suerte de personaje creado en torno a las canciones. Pero yo siempre procuro que ese personaje no impida ver lo que de verdad importa, que son las canciones. Yo creo que las canciones son actos de empatía, son un lenguaje que te pone en comunión con mucha gente y te dan la posibilidad de lo más maravilloso que tiene dedicarse a este oficio, que es poder viajar y conocer gente diferente y culturas diferentes. Por eso, cuando veo un artista que me gusta pero que mantiene esa actitud osca con un periodista, a mí personalmente me da mucha rabia.
Es la primera vez que vienes a Lima…
Sí, sí. Es la primera vez que viajo a Perú.
Hermann Melville dijo sobre Lima algo muy parecido a lo que tú dices sobre Ciudad Vampira. Dijo que era la ciudad más triste que uno se podía imaginar…
¿Ah, sí? (risas) No sabía, y a mí me gusta mucho Herman Melville… ¿Realmente crees que Lima es así?
Es la impresión que le dio a él… ¿Tú qué cosas sabes de Perú o qué esperas encontrar en tu llegada a Lima?
La verdad es que soy bastante ignorante al respecto. Sobre la cultura musical en Perú espero conocer algo y volver con algunos discos y algunas recomendaciones.
¿Qué va a encontrar tu público este 24 de agosto?
Vamos a ir en un formato reducido, de trío, con un guitarrista más y un percusionista. Vamos a interpretar canciones de la mayoría de los discos, no vamos a centrarnos tanto en Canciones populistas. Haremos canciones que en sus versiones originales tenían vestimentas distintas a las que vamos a mostrar.
¿Y tú qué esperas de este concierto?
Vamos a esperar, sobre todo, el feedback que podamos recibir del público. Y trataremos de hacer una actuación lo más sincera, lo más honesta y lo más peligrosa posible.
Por Omar Mejía Yóplac