Cannes 2024 ha sido testigo de una destacada presencia peruana gracias al talentoso director Víctor Checa y su innovador proyecto «El último rey», que se presentó en el marco del festival.
Por Mariella Aguirre
El cine peruano también ha tenido presencia en Cannes. Víctor Checa fue invitado a participar en La Fabrique Cinéma, un prestigioso programa de apoyo a cineastas emergentes de todo el mundo que se lleva a cabo en el balneario en el marco del famoso festival. Allí presentó «El último rey», una mezcla de géneros que combina coming-of-age, western y ciencia ficción con un toque de vampiros.
«Es una película de vampiros coming-of-age western futurista. La idea básicamente es el encuentro entre un niño vampiro que viene de una familia aristócrata y una niña criada en un mundo distópico de ciencia ficción», explicó el director peruano.
La película fue producida por Bertha Navarro (El laberinto del Fauno), Sebastián Cordero (Rabia), Christoph Hahnheiser (El hombre de Londres), David Matamoros (El hoyo), Ángeles Hernández y Javier Salvador, y se estrenó en el 25 Tallins Black Nights (2021). Participó también en festivales como Locarno, Guadalajara, Málaga, Neuchatel, Los Ángeles y Lima, entre otros. Ganó el premio del jurado en el Festival Internacional de Cine de Beijing (BIFFF) en la sección Forward Future.
Un espacio imaginario futurista con influencias peruanas y mexicanas
Checa eligió fusionar elementos de Perú y México en «El último rey», creando un espacio imaginario futurista que une el origen de ambas repúblicas. «Creo que Perú, y sobre todo la región de donde viene mi familia, que es el norte de Perú, tiene elementos muy similares a ciertas regiones de México», comentó.Además, el cineasta tiene un vínculo personal con México de más de 15 años, considerándolo como su «segundo hogar».
Víctor Checa en La Fabrique Cinéma de Cannes
La participación de Checa en La Fabrique Cinéma es una oportunidad importante para visibilizar el cine peruano a nivel internacional. «Yo creo que el cine peruano es muy diverso. Estamos teniendo mayores mecanismos para que se visibilice. Hay una posibilidad muy grande del cine peruano y lo que está pasando ahora es que poco a poco nos estamos dando a conocer», afirmó.
La Fabrique no es una competencia, sino un espacio de colaboración y aprendizaje que permite generar visibilidad para proyectos como «El último rey» y abrir puertas para futuros cineastas peruanos, promoviendo la colaboración regional e internacional.