El alza se debería a la mala gestión del director de AgroRural según la Contraloría General de la República. Un saco de fosfato cuesta S/. 250 soles.
Por Sergio Herrera
El Valle del Mantaro en Junín se encuentra en emergencia por el alza de precio de los fertilizantes. Los agricultores se han visto obligados a abandonar sus terrenos de cultivo en medio de una grave crisis alimentaria. El dominical Contracorriente de Willax reveló que las políticas públicas del gobierno de Pedro Castillo no han dado ningún resultado visible en los campesinos. A pesar que el mes pasado, declaró en emergencia el sector agrario y autorizó la compra de fertilizantes por el monto de 348 millones 887 mil 735 soles.
La Contraloría General de la República denunció a través de dos informes que el proceso defectuoso de la adquisición de fertilizantes estuvo a cargo de Rogelio Huamaní, director de AgroRural y militante de Perú Libre. Su gestión entorpeció la compra y entrega de los químicos.
Las consecuencias pueden ser fatales. Así, Wilfredo Mayma, dirigente agricultor de Tarma, explicó que estos insumos ya no se pueden comprar por sus altos precios. Un saco de fosfato cuesta actualmente S/. 250 soles. Una escasez que provocará pérdida de hectáreas de cultivo. No obstante, recordó que este desastre pudo ser evitado, pues los campesinos enviaron diversas propuestas al Ejecutivo sin obtener respuesta. Irónicamente, esto ocurre en Junín, la región natal de Vladimir Cerrón, fundador y secretario general de Perú Libre.
La reacción de los comuneros
Los agricultores ya comienzan a sentirse los efectos de la crisis. Por ejemplo, los comuneros Isidoro Cárdenas y José Condezo declararon sentirse abandonados por las autoridades y perciben el futuro como incierto. «El único responsable ahorita de que el Ministerio no nos soluciones los problemas es el mismo presidente», declaró Ángel Misayauri, presidente del Frente Defensa Región Junín. En las últimas semanas, los precios de fertilizantes se han elevado en regiones tan diversas como Piura, Puno, Tacna y Arequipa. En esta última, hace dos semanas se anunció el sacrificio de miles de cabezas de ganado ante la incapacidad de alimentarlas.
Las proyecciones más optimistas sostienen que entre agosto y setiembre recién se podrían importar fertilizantes. Ya para entonces, habría comenzado la campaña de siempre. Aunque como se recuerda, una resolución suprema del Ejecutivo precisa la fecha límite de entrega este 6 de julio.
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