El hotel Palacio del Inka, ubicado en el Centro Histórico de Cusco, una verdadera joya de la ciudad, ofrece una experiencia única para disfrutar –con el más alto confort y elegancia– de un hotel museo.
Pensar en la ciudad del Cusco no solo nos remite a los incas y su cultura milenaria, tan conocida y admirada en el mundo entero. Hoy, esta maravillosa ciudad –que une y reúne a personas de todo el mundo– se ha convertido en un lugar perfecto para descubrir la historia del Perú y, entender el legado de la fusión de culturas en la capital del imperio incaico.
Por eso, el Hotel Palacio del Inka, a Luxury Collection Hotel, que se encuentra ubicado en la misma área del mítico templo Qoricancha y del Cusicancha, ofrece 203 habitaciones exquisitamente decoradas con arte y mobiliario colonial, que combinan perfectamente con lo último de la tecnología contemporánea, la exclusiva cama Luxury Collection, el mejor spa de la ciudad, entre otras comodidades adecuadas a las más altas exigencias y gustos. En la monumental Casona de los Cuatro Bustos que da origen al hotel –que tiene más de cinco siglos de antigüedad y cuyo primer ocupante fue el conquistador y primer gobernador del Perú, Francisco Pizarro– se encuentran las 17 suites coloniales que cuentan con sistema de oxigenación, y cuyos techos y frisos han sido delicadamente pintados a mano por artesanos cusqueños herederos del arte colonial.
En el hotel, que alojó en algún momento al Museo de Arte Virreinal, se exhiben más de 195 piezas considerados tesoros artísticos correspondientes a las épocas preinca, inca, colonial y republicana, entre las que se encuentran 60 pinturas de la emblemática Escuela Cusqueña. Además, tiene la pared inca original más larga de la ciudad, que le da un toque muy especial a su bar. Recorrer la Casona de los Cuatro Bustos en un confortable viaje de exploración que lo llevará a los más emblemáticos edificios de la ciudad, es transportarse en el tiempo y ser testigo de cómo se llevó a cabo la fusión cultural durante la colonia y que es la que define la belleza de la ciudad cusqueña hoy en día. Prepárese para vivir seis siglos de historia en un lugar verdaderamente extraordinario y con un servicio de lujo.