Las dudas rondaban desde hace varios días. Pero no ha sido hasta el último fin de semana que los peores augurios se confirmaron: dos de las cuatro capitales de la moda se han rendido ante el avance del coronavirus.
Por Redacción COSAS
Al igual que los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, los grandes eventos previstos para los próximos meses empiezan a asimilar la imposibilidad de su celebración. Esto debido a la crisis sanitaria global provocada por la propagación del coronavirus. Así, en el mismo día en que el gobierno francés declaró la prolongación del confinamiento del país hasta el próximo 15 de abril, la Federación de la Alta Costura y de la Moda tomó la palabra a través de un comunicado.
«La progresión de la epidemia del COVID-19, que se está acelerando en todo el mundo, ha propiciado la toma de severas decisiones con el objetivo de proteger a nuestras maisons, sus colaboradores y todos aquellos que trabajan en nuestra industria. Como consecuencia, el consejo de dirección de la Fédération de la Haute Couture et de la Mode considera que las condiciones no son las apropiadas para permitir el desarrollo de la Paris Fashion Week Masculina ni de la Semana de la Alta Costura«, explicó la organización.
As bajo la manga
De esta manera, quedaron anulados los eventos dedicados a la presentación de las colecciones para hombres, prevista del 23 al 28 de junio, así como el de la Alta Costura, programada del 5 al 9 de julio. La determinación ha sido tajante y llega después de la controversia suscitada por la celebración de la Paris Fashion Week, el pasado febrero. Como se recuerda, por aquella fecha, la de Milán había concluido en un clima incierto, con la ciudad inmersa en una crisis sanitaria.
En el mismo comunicado, la institución ha añadido que «trabaja activamente con sus miembros sobre la posibilidad de proyectos alternativos». Paralelamente, la organización del evento italiano ha comunicado que su semana de la moda masculina será pospuesta hasta setiembre, cuando se realice la Fashion Week femenina. «La decisión se ha vuelto necesaria a causa de la difícil situación a causa de la pandemia», expresó la Camera della Moda Italiana (CNMI), en un comunicado remitido minutos después al de su homóloga francesa.
Cabe señalar que la organización también está trabajando en «nuevos formatos digitales y modalidades de encuentro en plataforma B2B y B2C, todo esto en favor de las marcas, de las empresas de lujo y de todos los actores del sistema». Así, los «ochocientos showrooms presentes en Milán tomarán un rol activo en la nueva narrativa de las pasarelas».