Emprender en un país donde el consumo de marcas locales aún es un desafío, Winnie logró abrirse un espacio en la industria textil, con más de una década de experiencia y dos marcas exitosas, Meh y Rebels, está próxima a lanzar su nueva colección

Por: María Jesús Sarca Antonio

La travesía de Winnie Chue en el mundo de la moda comenzó a los 17 años, cuando empezó a experimentar con la creación de prendas de manera artesanal. Estudió diseño gráfico y fotografía, pero encontró su destino artístico en el mundo de la moda. “Todo empezó como un hobby, paralelamente a mis estudios. Comencé a formar mi marca de una manera un poco artesanal, haciendo modificaciones en algunas prendas”, nos dijo. Desde entonces, la dedicación y la pasión por la moda se manifestaron, aunque su trayectoria, de 12 años, estuvo marcada por “muchos errores y aciertos”.

Winnie narró que sus primeras clientas fueron sus familiares y amigas.

Su primera tienda, con su marca Meh, fue en un local familiar. Este espacio le permitió probar el mercado y conocer a sus clientes, lo que resultó ser una experiencia valiosa. “Me dio la visión de lo que era tener un negocio propio y decir: ‘ok, sí se puede vivir de esto’”.

Con Meh ya posicionado, se asoció con Renato Moquillaza, y decidió crear Rebels, hace seis años. Con el paso de los años, Winnie fue encontrando a su público. “Fuimos abriendo una tienda, por ahí cerrando otras, encontrando nuestro público objetivo”, nos dice. Fue una apuesta arriesgada, enfocada en diseñar ropa para hombres, algo que no existía en su oferta inicial con Meh, que está destinada solo a un público femenino.

Meh y Rebels son dos marcas totalmente distintas en su estilo. Meh tiene toda la personalidad de Winnie, cómodas y versátiles, además de ser la marca con la que comenzó, la acompañó en varias etapas de su vida. En cambio, Rebels tiene el estilo de Renato y formó una comunidad que ama el diseño original y la calidad en las prendas.

La colaboración con Renato aportó un enfoque más profesional y permitió a Winnie ampliar su conocimiento en el rubro textil.

El reto del consumidor peruano

Uno de los mayores desafíos que enfrenta Winnie es el disminuido consumo de marcas peruanas. Ella nos dice que aún falta educar al consumidor y enseñarle que vale la pena apostar por marcas locales. “Creo que sobre todo es el miedo del público que piensa que una marca peruana no tiene un proceso o no posee la calidad suficiente”, apuntó.

Además, existen miles de marcas que, más allá de significar una competencia, Winnie lo toma como el impulso para salir de la zona de confort. Invita al público a detenerse y conocer marcas nacionales: “Debemos compararnos menos y apreciar más al producto peruano”.

Además, difiere acerca de la constante comparativa entre marcas de grandes tiendas retails con otras menores en el Perú. “Cuando a veces se le pregunta al consumidor por cuál optar, responden que las marcas de más calidad son las que encuentras en centros comerciales”, nos dice y explica que en el medio de un extremo al otro están todas las demás marcas peruanas que poseen una alta calidad en la producción textil.

Winnie y su equipo educan al consumidor acerca del proceso de producción a través de sus redes sociales.

La falta de confianza en las marcas locales es un obstáculo constante, pero Winnie y su equipo trabajan arduamente para mejorar esta percepción en la calidad de sus prendas: “Nosotros trabajamos la tela desde cero”, pues explica que muchas veces les toca mandar a elaborar su propia tela.

La experiencia en retail

Uno de los sucesos más importantes en la carrera de Winnie fue la oportunidad de vender en Falabella, uno de los retailers más grandes del Perú. “Cuando nos llamaron para entrar, en verdad yo sentía que era una súper oportunidad para nosotros, como Meh”, nos contó.

Además,  el lugar donde se exhibió fue en una ubicación muy importante en Lima: el Jockey Plaza. Esta experiencia le permitió a Winnie entender mejor el funcionamiento del retail en el país, adaptarse a sus exigencias y posicionarse como marca.

“Creo que ya quedamos mucho más preparados”, reveló. La rápida rotación de mercancía y la demanda del consumidor le brindaron a Winnie una visión más amplia del negocio. Esta vivencia fue enriquecedora, a pesar del tiempo limitado. “Desde que nos ofrecieron la oportunidad, sabíamos que sería un pop-up de unos meses y coincidió con la temporada navideña”, nos narró.

Creando comunidad

Winnie contó emocionada que sus dos marcas la han acompañado en las diferentes etapas de su vida.

Tanto con Rebels como con Meh se realizan campañas que “jale el ojo al 100%”. Esto implica invertir en materiales visuales de alta calidad: “Buscamos buen equipo de fotógrafos, de videógrafos, para tener un material que sea bien potente”.

La construcción de una comunidad fue clave para Winnie y sus marcas. Ella está pendiente de los nuevos trends y dijo que le encanta manejar sus redes sociales, en Instagram y TikTok. Reconoce la importancia de conectar directamente con los consumidores, a través de una interacción constante y una relación cercana con sus clientes. Este es su elemento diferenciador, que le permitió conocer mejor a su audiencia y adaptar sus colecciones a sus necesidades.

Meh Academy: Un espacio de formación

La voluntad de Winnie por apoyar a otros emprendedores la llevó a crear Meh Academy, y lo pudo lograr junto a su socia y mano derecha Letti Huaraca. Este es un espacio dedicado a la formación de futuros empresarios.

“Siempre tuve el ‘bichito’ de querer hacer algo para emprendedores, porque sé lo difícil que es el camino de emprender en el Perú”, contó. Ella es consciente de que la formalidad en la industria textil en nuestro país aún está en un nivel bajo. Por eso, trata de formar a los que deseen crecer con sus marcas: “Es una academia de emprendedores para emprendedores”. Esta iniciativa busca compartir y educar a partir de su propia experiencia.

Meh Academy ofrece talleres en diversas áreas, ofreciendo un conocimiento más integral sobre el mundo del emprendimiento.

Próximos proyectos

Winnie nos anunció que convertirá su tienda (ubicada en la av. 2 de mayo, 1675, en San Isidro) en La Casa Meh, que posee toda la esencia de Winnie y Meh, donde nacerá un nuevo proyecto enfocado en el cuidado personal llamado MM Body, acompañado de la tienda de ropa, una pequeña cafetería y la academia de Meh. Será un espacio especial para disfrutar y desconectar. Además, están próximos a abrir una nueva agencia encargada de hacer eventos, activaciones para nuevas marcas y más, de la mano de Ana Paula Bustos.

Nos contó de la próxima colección de Meh, en septiembre, tendrá la esencia de los inicios de la marca, recordando el motivo por el que se enamoró de la moda. Es la primera colección que será diseñada al 100% por Winnie. Además, están expandiendo la línea de productos a pijamas, ropas interiores, denim y buzos. En cuanto a Rebels, la colección que se viene es prometedora. Será de las más grandes producciones que han realizado y la primera vez que tendrán tantas prendas en denim.

Esta nueva etapa, marcada por el lanzamiento de sus nuevas colecciones en Meh y Rebels, estará totalmente a cargo de Winnie.

También nos contó que aspira una expansión nacional e internacional. Con Rebels ya lo logró, vendiendo sus prendas durante una temporada en Chile y piensa volver con su nueva colección. Espera tener éxito y abrirse al mercado de México y Colombia.

A través de su experiencia, Winnie nos demuestra que con dedicación, perseverancia, un enfoque en la calidad y un equipo comprometido, es posible superar los desafíos del emprendimiento en el Perú. “Todo lo que aprendí (desde hacer una muestra, el molde, la tela, distribución, redes), lo aprendí en el camino”.

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