Mario Testino participó en la campaña Otoño 2017 de Carolina Herrera con una propuesta visual donde participaron las modelos Lily Aldridge, Grace Elizabeth y Maria Borges.
La primera vez que Mario Testino trabajó con Carolina Herrera fue en el 2015, cuando la diseñadora venezolana decidió apostar por una campaña global para dar a conocer su nueva colección. Así, decidió optar por Testino, quien también es uno de sus amigos cercanos, como el fotógrafo más idóneo para poner en imágenes sus ideas.
«Conozco a Mario desde hace décadas y estoy encantada de que por fin hayamos encontrado el momento adecuado para empezar nuestra colaboración. Tiene un ojo inimitable y compartimos una misma sensibilidad», señaló la diseñadora a Harper’s Bazaar en el marco de su primera colaboración juntos.
Para Testino también fue un elogio trabajar con Carolina Herrera, ya que la diseñadora simboliza la mistura latinoamericana en los Estados Unidos. «Se trae sus culturas, sus tradiciones, su concepto de familia. Y también su concepto de lo chic, de cómo a los latinoamericanos les gusta vestirse y arreglarse, y estos valores son en realidad los de la misma Carolina», concluyó en la revista.
La semana pasada, y tras cuatro colaboraciones juntos, Carolina Herrera dio a conocer que pondría su trabajo en las manos del fotógrafo peruano -una vez más- para la colección Otoño 2017 que verá la luz en el mes de septiembre. Para realizar las imágenes y el concepto publicitario de esta campaña, también se contactó a las modelos Lily Aldridge, Grace Elizabeth, y Maria Borges -en lo que sería su debut con la marca-.
Elegancia ready to wear:
En esta ocasión, las imágenes evocan el estilo clásico de los retratos familiares que caracterizan a Testino, con el espíritu de mujeres fuertes y contemporáneas listas para cualquier evento en la ciudad. Los looks de la campaña buscan rescatar la naturaleza ready to wear con prendas que se pueden llevar con facilidad en la ciudad, pero sin perder la elegancia ni la femineidad.
La camisa blanca, por ejemplo, es el icono de la marca y de esta colección, pero ahora desafía escalas y proporciones. En este sentido, veremos siluetas limpias, terciopelo, seda, gasa, y vestidos largos con capas de organza: cada elemento revela la impecable artesanía del atelier neoyorquino de la marca a través del rostro de mujeres empoderadas por Mario Testino.