Debutó en la televisión en el año 2006, en la teleserie nacional “Esta sociedad”. Es la segunda vez que interpreta el personaje de Sally Bowles. En 2011 cantó en el concierto de Paramore junto a la banda nacional Locomotor.
Por Dan Lerner
¿Cómo quién querías ser cuando eras niña?
Quería ser como Yuri porque cantaba, actuaba y bailaba. Igual eso me duró poco. Nunca he sido muy fanática de nadie. No tenía posters, no coleccionaba figuras, nada de eso. Solo soñaba con ser artista.
¿Qué tanto de ti hay en tus personajes?
Creo que una forma de llegar a un personaje es a partir de uno mismo. Finalmente es uno quien le presta voz y cuerpo y alma al personaje. Pero esto depende del personaje que me toque. Hay algunos que no tienen nada en común conmigo y hay otros con los que puedo vincularme directamente.
¿Te gusta más hacer teatro, televisión o cine?
Teatro, cine, televisión. En ese orden.
¿Hay algún género en el que te sientas más cómoda?
Todos me gustan. Tengo muchas ganas de hacer una obra de texto. Me gustan mucho los musicales pero el espacio creativo es a veces limitado. Me gustaría mucho hacer un personaje en una obra de texto. Lo más pronto posible.
¿Qué es lo que más te gusta de ser actriz?
La oportunidad que te da la actuación de conocerte a ti mismo y conocer a la sociedad y el comportamiento humano. Te da la posibilidad de ponerte en los zapatos del personaje, sea como sea, y eso hace que practiques, si prestas atención, la compasión.
¿Cantar, actuar o bailar?
Actuar.
¿Qué harías si no te dedicaras a la actuación y al canto?
Sería terapeuta. O pintaría. O sería músico.
¿Qué talento especial te gustaría tener?
Me gustaría tener esa capacidad que tienen algunos para manejar sus horarios y organizar grandes eventos.
¿Cuál crees que es o ha sido tu mayor adicción?
Las papas fritas.
¿Cuál ha sido el logro más grande de tu vida?
Estar aquí, viva y bien, y seguir siendo una buena persona y por supuesto poder vivir, hasta el momento con mucho esfuerzo y mucha suerte, de mi vocación.
¿Qué te gusta de la fama? ¿Y qué no te gusta?
No me considero famosa. Creo que por el momento tal vez soy popular pero no famosa. Y de la popularidad actual me gusta que algunas personas leen y acogen mi transparencia, y entonces son cariñosos y generosos conmigo. Aprecian mi trabajo y eso es muy gratificante y lo agradezco mucho. Recibir cariño de un desconocido o que te agradezcan por algo que hiciste por ellos sin saberlo es una suerte enorme.
No me gusta que a veces hay que guardar ciertas posturas cuando no se tienen tantas ganas, y que la exposición te hace un blanco de críticas inmediatamente. Las redes sociales, además, ahora deshumanizan y a los que están más expuestos, aún más, así que a veces no hay libertad de expresión pues se nos juzga más rápido. No es siempre mi caso, pero sí pasa.
Tienes más de un millón de seguidores en Twitter. ¿Qué te gusta de las redes sociales?
Me gusta que se puede generar espacios para publicitar cultura cuando no hay otros medios, o no tantos, para hacer llegar esa información seriamente o directamente. No hay tantas ventanas para publicitar espectáculos que, por ejemplo, se autogestionan sin auspicios o dinero, y las redes sociales son una buena ventana para hacerlo.
¿Hay muchos trols en tu cuenta?
Pocos, felizmente.
¿Es difícil ser una mujer exitosa en el Perú?
Es difícil que te vaya bien sin generar dudas respecto a si hay merecimiento o no. En mi caso, no he sentido nunca que por ser mujer sea difícil que me vaya bien.
¿Es más difícil interpretar un rol que sabes que ha sido interpretado antes por Liza Minnelli? ¿Hay más presión?
También lo han interpretado, aparte de ella, muchísimas actrices muy talentosas en las versiones teatrales. Más bien, ¡qué bonito tener la oportunidad de interpretar personajes que han sido asumidos por buenas actrices! Sin embargo, si me pusiera a pensar en todos los personajes que he hecho y que han sido interpretados por actrices increíbles que admiro mucho y si eso ejerciera presión en mí, simplemente no podría trabajar.
¿Por qué “Cabaret” es una obra que podría calar en el público peruano?
Un musical siempre es muy vistoso; la música en vivo, las coreografías y las canciones siempre son un gran punto a favor. Este musical en particular habla mucho de política, que es algo de lo que tenemos que hablar ahora. Y también habla de otros temas, como juzgar o etiquetar a alguien por su labor o por su sexualidad. Habla de la victimización, de hacerse el ciego con lo que pasa alrededor. Con nuestra incapacidad de decidir. Es un musical de esos que no solo cuenta una historia tierna o brillante, sino que tiene mucho contenido. Además, escénicamente es avezado y atrevido.
¿Sally Bowles es uno de los papeles más difíciles de tu carrera?
Sí. Cuando lo hice por primera vez tenía veintidós o veintitrés años. Así que fue difícil asumirlo, yo aún me sentía menor para hacerlo. Ahora me resulta igual de difícil porque es un personaje complejo que tiene un vuelo super claro y no tantas escenas para hacerse entender. Es muy conmovedor para mí y estoy muy agradecida de poder volver a hacerlo a esta edad, ya desde la mujer que soy ahora y con la experiencia de vida que tengo. Es un regalo.