Desde que saltó a la fama al interpretar a la reina Elizabeth II en The Crown, no solo consiguió la admiración de miles de fans, sino que además ganó un Emmy, un Screen Actors Guild y un Globo de Oro. En el cine, ha protagonizado First Man, donde interpretó a la esposa del astronauta Neil Armstrong, y The Girl in the Spider’s Web.
Por Yenny Nun
—¿Te sorprendió ver cuál era el rol de las mujeres durante la carrera espacial en la década de los sesenta?
—Lo que mostramos en la película (First Man) sucedió hace cincuenta años, pero solo hace veinte años que viajó al espacio la primera mujer astronauta. En nuestra cinta no damos la impresión de que las mujeres estaban viviendo a medias. Janet (su personaje) tenía una relación de igual a igual con su marido.
—¿Ella era realmente tan fuerte? ¿O la hacen parecer así porque ahora es importante presentar papeles femeninos fuertes?
—Janet era fuerte, vulnerable pero también increíblemente valiente, resiliente hasta el extremo, ferozmente inteligente, con una gran cantidad de energía y, además, una atleta y nadadora sincronizada. No creo que hoy las mujeres lloren por ver a otras mujeres fuertes; sabemos que todas somos fuertes, lo que queremos es ver buenos personajes femeninos en la pantalla.
—Has interpretado tanto a la reina Elizabeth II como a la esposa de un astronauta… ¿qué te guía a la hora de elegir tus personajes?
—Decidí guiarme por mi instinto aunque me equivocara, y aquí me tienes… Y me encantaría seguir interpretando a reinas por el resto de mi vida, ya que no quedan demasiadas (risas).
—¿Cuánto crees que ha cambiado la realeza desde los primeros años del reinado de Elizabeth II, cuando le prohibió a su propia hermana casarse con un hombre divorciado?
—Ahora esas cosas ya no le importan a nadie. Cómo cambió la realeza es consecuencia de cómo hemos cambiado nosotros. Ahora vemos que una mujer divorciada se casó con el príncipe Harry.
—Para ti, ¿qué significa ser mujer en los tiempos que vivimos?
—Desde que comenzó el movimiento Me Too, la gente está discutiendo temas que nunca antes se tocaban y las mujeres están sintiendo que pueden compartir experiencias que pensaron que nunca serían conversadas. Me siento con suerte de ser mujer. Estamos en un punto de cambio en la historia de la humanidad.
—¿Cómo manejas la fama con tu hija Ivy Rose?
—Espero que nunca sea un problema en nuestra relación. Siempre he dicho que si algo interfiere, no seguiré trabajando; ese es el precio que estoy dispuesta a pagar, porque mi hija es y será siempre mi prioridad número uno.