A sus cincuenta y un años, Julia Roberts extiende los límites de su carrera con una prometedora serie y una nueva película que explora la crisis de los opioides en Estados Unidos.
Por Yenny Nun
Foto de Calzedonia – Colección Otoño-Invierno 2018.
—¿Por qué decidiste participar en una serie de televisión (“Homecoming”)?
—Hace tiempo me habían enviado un podcast y lo escuché sin siquiera saber qué era un podcast. Me recordó a los antiguos radioteatros. Meses más tarde, recibí una llamada del director y guionista Sam Esmail, sin imaginar que su idea era transformar ese podcast en una serie. Tuvimos una conversación muy creativa, y la verdad es que lo elegí a él más que a la serie.
—¿Puedes describir a tu personaje?
—Es extraño, pero no puedo. “Homecoming” es un puzzle demasiado complejo de explicar. Lo único que puedo decir es que interpreto a Heidi en el presente, una mesera que no recuerda nada de su vida anterior y que en el pasado trabajó como terapeuta para un grupo de soldados que regresa de la guerra.
Foto: Instagram @juliaroberts
—¿Qué opinas de la televisión actual?
—Creo que en los últimos años el medio ha cambiado totalmente. Ya no sé lo que es y lo que no es, porque existen tantas plataformas y tanto que ver. Yo no veo mucha televisión, prefiero que mis amigos me recomienden algo que valga la pena. Así ocurrió con “Peaky Blinders” y con “Big Little Lies”.
—Vas a estrenar la película “Ben is back”, y algunos consideran que es una de las mejores actuaciones de tu carrera…
—Muchas gracias. El desafío del guión me impulsó a aceptar. Hubo escenas muy difíciles, donde Lucas Hedges y yo tuvimos que filmar en la mitad de la noche en temperaturas de 23 grados bajo cero. Cuando aceptamos, jamás nos imaginamos las condiciones en que tendríamos que trabajar.
—¿Ya conocías a los actores?
—No, y por eso, antes de comenzar el rodaje, decidí invitar a mi casa a Lucas y Kathryn Newton para que nos conociéramos a fondo y nos sintiéramos cómodos entre nosotros. Los respeto muchísimo y los adoro. No me imagino a ningún otro actor interpretando sus roles. No puedo decir suficientes cosas positivas respecto a Lucas, tanto como persona como artista. Me parece un actor completamente dedicado, y además un tipo muy bueno y dulce. Pasó con nosotros el pasado Día de Acción de Gracias.
Foto: Instagram @juliaroberts
—Interpretando a la madre de un hijo drogadicto, ¿te imaginaste vivir una experiencia similar con tus hijos?
—Ni se me pasó por la mente. Creo que si piensas en todas las pesadillas de la maternidad, le pondrías candado a tu casa y no dejarías salir a tus hijos. Es mejor enfocarse en lo positivo, ser optimista frente al mundo, esperar que tu familia salga intacta de este viaje.
—¿Crees que esta película ayudará a comprender mejor la epidemia de opioides en Estados Unidos?
—Creo que fue una de las metas de Peter Lucas, que escribió el guión como una reacción política. La crisis de los opioides ha estado presente durante mucho tiempo en este país; lo que sucede es que no ha ocupado las primeras planas porque existen muchos otros problemas que han tomado su lugar. Con esta película, Peter humanizó el asunto a través de esta familia e hizo una radiografía respecto a las consecuencias humanas de la crisis.
Julia Roberts en la premiete de «Homecoming» en Los Angeles.
—¿Tuviste la oportunidad de conversar con madres de jóvenes adictos?
—No, me parecía muy egoísta utilizar su dolor para beneficiarme. Afortunadamente, vivimos en una época donde el acceso a la información online es enorme, así que encontré mucho material y pude leer a fondo acerca del tema.
—¿Cómo fue meterte en la piel de una madre que hace todo por salvar a su hijo?
—Fue una gran oportunidad. Pensé que era un personaje muy bien escrito, y me gustó el hecho de que, desde mi punto de vista, ella actúa bien y mal al mismo tiempo. Me pareció algo único, ser capaz de interpretar a alguien que perfecciona esta continua dicotomía, una mujer que nunca se da por vencida.
Junto a Andrew Burlinson y Danton Char, Julia Roberts va camino a recibir el premio Woman of the Year, en el Hasty Pudding Theatre, en 1997.
—¿Piensas que las grandes farmacéuticas comparten responsabilidad por esta crisis?
—Estas empresas han sido totalmente responsables, y llegó la hora de que se hagan cambios no solo en ellas, sino también en el trabajo de médicos y dentistas, que muchas veces recetan opioides a jóvenes adolescentes en dosis mayores a las necesarias.
—¿Probaste drogas en tu adolescencia?
—Tuve la suerte de crecer en un pueblo muy pequeño de Georgia, en una comunidad donde las drogas no eran parte de la ecuación. Si algunos de mis compañeros de colegio las usaban, nunca me enteré.
Foto: Instagram @juliaroberts
—¿Sueles pasar la Navidad en familia?
—Por el momento, sí. Hay niños mayores que prefieren pasar las fiestas con amigos, pero si tienen suerte como nosotros, optarán por invitar a sus amigos a nuestra casa. No pierdo a mis hijos como ocurre en otros hogares, donde prefieren pasarla esquiando.
—¿Es coincidencia que “Ben is back” esté ambientada en los días que rodean la Navidad?
—¡Es sincronía! Peter hizo algo muy inteligente creando una cinta que transcurre durante las 24 horas que van desde la nochebuena hasta la Navidad de la mañana siguiente, primero creando una imagen angelical y perfecta del mundo, y abriendo una puerta para mostrarnos la oscuridad que existe dentro de esta casa
