El cantante, a través de su instagram, ha solicitado el apoyo de sus fans para superar un mal que lo persigue desde su adolescencia.

“He estado pasándolo mal y sintiéndome muy desconectado y raro. Siempre consigo recuperarme, así que no estoy preocupado. Solo quería hablarles y pedirles que recen por mí. Dios es leal y sus plegarias son escuchadas”, fue el grito de ayuda de Justin Bieber en sus redes.

El cantante de 25 años no está pasando un buen momento. Hace algunas semanas fue su esposa, Hailey Baldwin, quien se sinceró sobre su ansiedad. Ahora fue el turno del canadiense, quien le comunicó a sus más de 100 millones de seguidores sobre el estado de su salud mental.

Lucha constante

Según él mismo reveló en la revista People, actualmente se encuentra recibiendo tratamiento para superar la depresión que enfrenta desde sus inicios en la industria musical. De acuerdo a Bieber, sincerarse con sus fans es parte fundamental del tratamiento para su recuperación.

Bieber publicó una fotografía en Instagram, donde se le ve junto al rapero Kanye West y Scooter Braun, su manager, en la que añade: «Solo quería mantenerlos informados, espero que lo que yo estoy pasando resuene con ustedes. He estado luchando mucho.” Los seguidores del cantante sospechan que su estado actual se debe a que experimentó la fama desde muy temprana edad.

En 2015, Bieber aseguró que “estaba deprimido todo el tiempo” y que luchaba diariamente contra ese mal. Asimismo, en una entrevista que le brindó a Vogue, cuya portada protagonizó junto a Baldwin, este confesó que poco después de alcanzar la fama se volvió sumamente arrogante. Admitiendo, también, haberse medicado contra los altos niveles de ansiedad que experimentaba.

«Llegué a un punto de mi vida en el que me sentía como el mejor del mundo. La gente me ama. Las drogas pusieron una especie de pantalla entre mí y lo que estaba haciendo. Estaba en un lugar muy oscuro”, admitió.

Camino hacia la recuperación

En el 2017, el cantante tomó conciencia de su estado y canceló su gira mundial Purpose para ocuparse de su salud mental. “Necesitaba algo de tiempo”, aseguró. Ahora, el cantante se ha sumergido en la religión. Considerándola un soporte del proceso que enfrenta actualmente, asiste de forma recurrente a Hillsong, una iglesia australiana con sucursal en Nueva York.

A esta suele acudir junto a su esposa. Según confirmó él mismo, Baldwin, quien poco tiempo después cambió su nombre a Hailey Bieber, es uno de los pilares más importantes en su recuperación. La modelo nunca ha dudado en mostrar su apoyo a su marido.

«Soy emocionalmente inestable. Lucho por encontrar la paz. Siento que me importa mucho y quiero que la gente me quiera. Hailey es muy lógica y estructurada, lo que necesito. Siempre quise la seguridad: con el estilo de vida que vivo, todo es muy incierto. Necesito algo que sea seguro», declaró el intérprete a Vogue.