En un inicio, Emilia Clarke no iba a ser Daenerys Targayen, la rubia platinada que monta dragones, libera esclavos y descuelga mandíbulas con sus desnudos frontales en la serie más popular de HBO: Game of Thrones. El piloto del programa se filmó en 2009 con la actriz británica Tamzin Merchant (“The Tudors”), pero Merchant decidió dar un paso al costado. David Benioff y D.B. Weiss, creadores de la serie, reanudaron la búsqueda, hasta que se tropezaron con Emilia Clarke e intuyeron que nadie mejor que ella para dar vida a Khaleesi: “Así que cuando fuimos a la oficina del director de casting para conocerla fue más un asunto de ‘por favor, no te pongas difícil o loca’. No solo no fue difícil o loca: Emilia fue adorable, aterrizada, relajada y divertida”. Un detalle: el tipo de Emilia no encajaba con la descripción de rubia, alta y espigada que orientaba el casting. La belleza de Emilia es menos etérea y más desequilibrante: castaña, cejona, curvilínea y bajita (mide 1,57 metros). Algún envidioso se atrevió a llamarla gorda en redes sociales –vale la pena recordar a Umberto Eco, quien dijo que las redes sociales dan derecho a hablar a millones de necios– y Emilia, natural y directa, respondió: “En cuanto escuchas eso, lo primero que piensas es: ‘Estoy gorda’. Así que sencillamente dejé de leer lo que me hace daño, estoy intentando protegerme de cara a cualquier futuro desorden alimenticio”.
Antes de Khaleesi
Nació en Buckinghamshire, poblado ubicado al sur de Inglaterra. A los 10 años ya tenía claro que lo suyo era ser actriz. Estudió en el Drama Centre de Londres, escuela que ha ayudado a moldear talentos como Michael Fassbender, Colin Firth y Tom Hardy. Sus primeros trabajos fueron un pequeño papel en la serie Doctors, de la BBC, una película para televisión con dinosaurios, Triassic Attack, y muchos comerciales. Emilia combinaba su trabajo de actriz con pequeños cachuelos en el mundo del catering y de las ventas por teléfono. Hasta que le dieron el papel de Khalessi: “Game of Thrones cambió mi vida. Le debo todo al show”.
Daenerys Targaryen, también conocida como “Khalessi” o “Mother of Dragons”, es uno de los personajes que más se ha empoderado a lo largo de las seis temporadas. La conocimos como una adolescente inocente y temerosa y ahora la vemos liderando ejércitos y dirigiendo ciudades con tenacidad, intuición y dragones. Es, sin duda, una de las más serias candidatas a quedarse con el Trono de Hierro.
Recientemente la actriz ha dicho que le gustaría que su personaje tenga un romance con el personaje de Yara Greyjoy (Gemma Whelan), con quien la vimos darse miradas seductoras en el penúltimo capítulo de la serie. Otro dato importante es que Emilia, junto a algunos compañeros de reparto, ha renegociado su contrato y va a cobrar $500,000 por episodio en las dos próximas temporadas.
El salto al cine
En 2014, Emilia dio el salto al cine con Dom Hemingway, filme en el que actuó junto a Jude Law. El año siguiente le encargaron la difícil tarea de tomar la posta de Linda Hamilton para interpretar a una de las grandes heroínas en estos tiempos tecnológicos y descreídos: Sarah Connor. Emilia le ganó el papel a Brie Larson. Lo duro vino después del casting, cuando la actriz británica tuvo que entrenar seis horas diarias para estar a la altura de las exigentes escenas de acción de Terminator Genisys.
Este mes veremos a Emilia explorar una faceta distinta en el drama romántico Me Before You, adaptación del bestseller de Jojo Moyes. La película trata sobre el nacimiento del amor y la complicidad entre un chico y una chica que son dos mundos opuestos. Emilia es Lou Clark, una torpe y burbujeante chica de clase obrera cuyo trabajo consiste en cuidar a Will Traynor (Sam Claflin, el de Hunger Games), yuppie que queda cuadrapléjico después de un accidente. “Puedo ser como Daenerys, pero esto es mucho más cercano a lo que soy: la chica que quiere pasarla bien, reírse, hacer muecas con la cara y disfrutar”, ha declarado la actriz conocida por su chispa.
Hace unos días Emilia mencionó al Perú en una entrevista con el portal Zimbio: “Bueno, me gusta mucho viajar y hacer cosas locas, las cuales están en lista. Cuando digo que haré algo, lo hago por las buenas o por las malas. Por eso, quiero ir a Machu Picchu, en Perú, ir al Polo Norte y saltar en paracaídas”. Puede que Emilia Clarke sea la chica perfecta: es preciosa y se mueve por el mundo como si no lo supiese.