Para confirmar indiscutiblemente que Alicia Vikander es la actriz del momento en Hollywood sólo basta con observar algunos hechos de la actualidad. Primero, que es la elegida para ser la protagonista de la nueva versión de Tomb Raider, franquicia que ya contó en el rol principal a Angelina Jolie. Luego, que este año se llevó un premio Oscar a su casa por su brillante actuación en The Danish Girl. Y también hay que señalar, sin restarle mucha importancia a esto, que forma junto a Michael Fassbender la pareja más talentosa, sexy y simpática de Hollywood. Pero todo esto no se dio de un momento al otro. Por eso eso te mostramos a continuación el camino que esta actriz sueca de 27 años (que hoy podemos ver en cartelera con Jason Bourne) tuvo que recorrer para hallarse donde se encuentra hoy.
1. Apuntó desde niña
En 1997 Alicia demostró sus habilidades interpretativas en un concurso de talento infantil. En él, la pequeña de sólo nueve años se presentó haciendo playback con una canción de Helen Sjöholm y consiguió ganar. Pero lo mejor vino cuando le preguntaron qué quería ser de grande. “Voy a ser una actriz”, dijo la niña sin titubear. Con objetivos claros siempre se llega lejos.
2. Aprendió de compromiso
Son varios los colegas que trabajaron con Alicia Vikander y luego han alabado su profesionalismo. Y esto es algo que fue forjando desde muy pequeña. La hoy actriz se dedicó al ballet desde los 9 hasta los 18 años y hubo un período en el que, con tan sólo 15 años, decidió mudarse sola a Estocolmo para poder continuar con su formación. Una clara muestra de compromiso y responsabilidad.
3. Superó rechazos
Aunque hoy es una de las actrices más codiciadas, Alicia también tuvo que aprender a superar algunos rechazos. Cuando tenía sólo 22 años, por ejemplo, audicionó para el papel de Blancanieves en Snow White and the Hunstman. Como la historia lo demuestra, Vikander no fue aceptada por los productores, quienes terminaron por otorgarle este rol a Kristen Stewart.
4. Eligió bien
Aunque ganó el Oscar por su papel en The Danish Girl, ella misma pudo haberlo ganado, ese mismo año, por su gran trabajo en Ex Machina, una joya del cine independiente que solamente recibió críticas positivas. A esta muestra de buen pulso en la selección de papeles se le puede sumar, claro, A Royal Affair, película danesa que en 2013 estuvo nominada al Oscar en la categoría de Mejor película de habla no inglesa.
5. Tuvo (y tiene) la ayuda de sus padres
Es fácil contar las historias en las que muchos padres se opusieron a la carrera actoral de sus hijos. En el caso de Alicia Vikander esto no ocurrió así. Todo lo contrario. Hasta el momento sus padres son claves en cada paso de su carrera. Es más, fue su padre quien, tras leer el guion de The Danish Girl, la convenció de aceptar el papel. “Tienes que hacer este papel”, le dijo.
