Elon Musk ha dicho que quiere que Twitter sea un foro de debate y calificó la prohibición de Trump como “moralmente incorrecta”. Sin embargo, el expresidente ha dicho que no se reincorporaría a la plataforma.
Por Rodrigo Schang
Elon Musk dijo el martes que «revertiría la prohibición permanente» del expresidente Donald J. Trump en Twitter y lo dejaría volver a la red social. Este es uno de los primeros comentarios específicos de Musk, el hombre más rico del mundo, de cómo cambiaría el servicio de redes sociales.
Elon Musk cree en la libertad de expresión
Musk, quien llegó a un acuerdo el mes pasado para comprar Twitter por 44.000 millones de dólares, dijo en una conferencia del Financial Times que la decisión de la compañía de suspender la cuenta de Trump el año pasado fue «moralmente incorrecto y absolutamente estúpido». Además agregó que «las prohibiciones permanentes solo socavan fundamentalmente la confianza en Twitter».
Después de que Musk firmara el acuerdo para comprar Twitter el mes pasado, reiteró su postura sobre la libertad de expresión y dijo que convertiría la empresa en privada para mejorar el servicio. Añadió que esperaba aumentar la confianza haciendo que la tecnología de Twitter fuera más transparente, derrotando a los bots que envían spam a las personas en la plataforma y “autenticando a todos los humanos”. También dijo que esperaba que sus peores críticos permanecieran en Twitter, porque “eso es lo que significa la libertad de expresión”.
If Twitter acquisition completes, company will be super focused on hardcore software engineering, design, infosec & server hardware https://t.co/m2HseK0TXl
— Elon Musk (@elonmusk) May 6, 2022
Twitter no debería decidir lo que se publica
Los comentarios de Elon Musk fueron un adelanto del tipo de cambios que podría hacer en Twitter, del cual se espera que tome posesión en los próximos seis meses. El multimillonario, que también dirige al fabricante de automóviles eléctricos Tesla y la compañía de cohetes SpaceX, se ha llamado a sí mismo un «absolutista de la libertad de expresión» y ha dicho que no está contento con la forma en que Twitter decide qué se puede y no se puede publicar en línea.
Pero hasta el martes, Musk, de 50 años, se había expresado principalmente en términos generales y no había mencionado las cuentas de Twitter que podrían verse afectadas por su adquisición. Llamó a la libertad de expresión “la base de una democracia que funcione” y habló de su deseo de dar a las personas más control sobre sus propias redes sociales. Al especificar que Trump podría regresar a la plataforma, Elon Musk desató una tormenta política.
Trump, la estrella de la discordia
Trump usó Twitter durante muchos años como un megáfono, reuniendo a sus 88 millones de seguidores en temas como la inmigración y persiguiendo a sus oponentes. Esa vía se cortó en enero de 2021 cuando Twitter, junto con Facebook y otras plataformas, prohibieron que Trump publicara tras el ataque al edificio del Capitolio de EE. UU. Twitter dijo en ese momento que Trump había violado las políticas y corría el riesgo de incitar a la violencia entre sus seguidores. Facebook prohibió a Trump por razones similares.
Trump, por su parte, ha dicho que no regresaría a Twitter incluso si se restableciera su cuenta, sino que promovería su propia empresa de redes sociales, Truth Social.
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