La exitosa serie colombiana “Pálpito” acaba de estrenar su  segunda temporada en Netflix. COSAS conversó en exclusiva con el actor Julián Cerati, quien reveló detalles de la serie y de su carrera.

Por Diego Ochoa

Tras descubrir que su esposa, Camila, fingió la muerte para desaparecer de su vida, Zacarías Cienfuegos elabora un plan maestro para traerla de regreso y vengarse de Simón, el hombre cuya esposa asesinaron para trasplantarle el corazón a Camila y de quien ella se enamoró. Ahora que es la mano derecha del presidente y cuenta con el apoyo de la organización —la horrible banda de tráfico de órganos—, Zacarías hará lo imposible para que Simón viva el mismo infierno que él. Su intención es clara: demostrar que, a veces, no queda más opción que convertirse en asesino por amor.

¿Actualmente estás viviendo en Colombia? 

Realmente voy oscilando entre Argentina y Colombia, pero el año pasado estuve prácticamente todo el año en Colombia durante la grabación de Pálpito.

Tu vienes de proyectos infanto juveniles como Disney y Nickelodeon. ¿Cómo fue para ti cambiar a un proyecto tan maduro como lo es Pálpito

Bueno, en realidad había hecho proyectos de otro tipo, quizás, no tan internacionales e incluso en teatro hice cosas un poco más jugadas, pero bueno en principio lo que más trascendió antes que Pálpito y otras que salieron de Netflix, sobre todo, fueron infanto juveniles y tenían que ver también con mi edad. De a poco, uno va queriendo buscar desafíos distintos, tengo ganas de nuevos desafíos. Siempre me gustó la composición, generar personajes camaleónicos, encontrar rincones míos, de más sensibilidad o que me ponen más incómodo a diferencia de otros que son más naturales en mí.

¿Qué reto significó prepararte como actor para este proyecto tan grande?

Realmente no sabíamos qué Pálpito iba a ser tan grande. Si bien, cuando uno agarra el guión y ve que tiene mucha potencia por muchos factores como el que esté muy bien escrita, el nivel de producción es muy bueno, el elenco termina cerrando y también le da el condimento satisfactorio, puede saber que va a funcionar, cuando todo eso sucede ya depende del público. Hay una cierta fórmula que indicaría que puede ser algo potente y con respecto a mi personaje, siempre hay que evaluarlo o por lo menos yo lo trabajo así siempre, el ir para atrás y comprender de dónde viene, cuál es su motivación, cuáles son los miedos y cuáles son las carencias.

Sino sabemos del sistema familiar que tiene, nos lo imaginamos porque al final somos perfiles psicológicos todo el tiempo y tenemos un origen psicológico y eso es la catapulta a cómo actuamos en el presente, entonces es muy importante eso intentar conocer el alma de cada personaje, de ahí se irá iluminando cada emoción y cada necesidad que tiene el personaje.

Para ti como actor, ¿es una prioridad aceptar proyectos con mensajes relevantes para la sociedad? 

Bueno sí, siempre es muy seductor, te seduce mucho las historias que pueden impactar un poco más o que traen algo nuevo, en lo posible, siempre estaría divertido e interesante hacer proyectos que puedan impactar o que toquen temas nuevos, la verdad, es que siempre es mucho más motivador. 

Al principio no tenían tan claro que Pálpito iba a ser el éxito que es y terminó convirtiéndose en las favoritas en Netflix a nivel global. ¿Cómo tomaste este hecho y cómo cambió tu carrera?

Bueno, en realidad, para mí lo que impacta en el público si bien es hermoso por el feedback, es un motor para seguir haciendo historias y decir está bueno quedarse contento con un proyecto. Es maravilloso, además, terminas un proyecto y ya estás pensando en otro. A mí personalmente me sirve eso como termómetro para decir este personaje tiene esto, funciona por acá, uno aprende muchísimo de cada personaje y es una motivación para seguir creando y contando historias a la gente.

En cada personaje pongo mucho de mí, me conozco a través de los personajes. Tomás, en este caso me hizo aprender algunas cosas de mí y uno le presta al personaje y el personaje le presta uno, entonces eso al final es lo más maravilloso, es la forma de expresarme y si encima toca algún corazón de la gente, buenísimo.

Estar en Netflix te da una exposición súper grande, ¿en algún momento te ha llegado a abrumar esa exposición siendo tan joven? 

No, siempre y cuando sea con respeto, la gente generalmente es muy cariñosa y muy buena onda, eso se siente y el amor está, así que ha sido muy lindo. 

Hay muchos papeles que requieren ciertos desafíos, en la primera temporada te vimos cantar. ¿Cómo te llevas con la música y con el canto?

Realmente el canto o la música hasta ahora viene añadido a lo actoral, a la interpretación digamos. Mi columna vertebral es la interpretación, la actuación y lo que requiere el personaje. Siempre voy a darlo todo para poder hacerlo bien, en este caso, ya venía practicando el canto y está presente en mí entonces lo sumé, pero lo que necesita el personaje siempre lo tengo que aprender, por ejemplo, a andar en un monociclo o a manejar un cohete, lo intentaré hacer.

¿Cómo consideras que tu personaje ha evolucionado para esta segunda temporada? 

La verdad que es muy lindo lo que sucede en esta temporada, evoluciona muchísimo y se vienen muchos desafíos para Tomás y para Samantha, se viene algo muy potente en lo que tienen que luchar codo a codo así que espero que la disfruten mucho.

Julián Cerati y Valeria Emiliani en Pálpito Temporada 2. Foto: Gustavo Cabrera / Netflix © 2023

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