De Princesa de Make America Great Again a Barbie de Miami. Ivanka Trump vuelve al escenario político, al acompañar a su padre en la Convención Republicana de Milwaukee.
Por Redacción COSAS
En 2021, la Princesa de Make America Great Again (MAGA), Ivanka Trump, se transformó en una Barbie de Miami, al huir de lo que ella llamó los ‘chacales’ de Washington. Además, Ivanka se sintió rechazada por la élite de Manhattan, aquella que su madre, Ivana Trump, solía dominar. Hacia el final de la presidencia de su padre, Ivanka buscó refugio urgentemente en el estado amigable con Trump, Florida. Junto con su esposo, Jared Kushner, y sus tres hijos, la familia se instaló en una lujosa mansión de $24 millones y 8,500 pies cuadrados en Indian Creek Island, en el exclusivo enclave de Miami Beach, que compraron en abril de ese año.
Ivanka Trump junto a su esposo Jared Kushner (Fuente: Getty Images).
Alejamiento de la campaña de Trump de 2024
Durante este retiro, hubo un distanciamiento entre el entorno republicano de Trump y el matrimonio Kushner-Trump. Disgustados de la política y sus intrigas, la pareja se retiró a una vida tranquila de lujo. Quienes los conocen, afirman que su nueva rutina incluía ver Game of Thrones, viajes familiares a la playa y cualquier cosa menos política, tras cuatro años en Washington.
El matrimonio Kushner-Trump junto a su hija Arabella y sus hijos Joseph y Theodore (Fuente: Instagram).
Cuando Trump inició su campaña actual, Ivanka trazó los límites más claros. Ausente en el lanzamiento de campaña en Mar-a-Lago en noviembre de 2022, lanzó un comunicado diciendo: ‘Estoy eligiendo priorizar a mis hijos pequeños y la vida privada que estamos creando como familia. No planeo involucrarme en política.’ Ivanka tampoco estuvo presente en las Primarias ni en el primer debate presidencial. No asistió al juicio de 2024 en Manhattan donde su padre fue condenado por 34 cargos graves; aunque se reunió con él afuera de la Torre Trump después. Ivanka no dió entrevistas con los medios, ni apariciones… nada. Fue un marcado contraste con su posición en las campañas de 2016 y 2020, cuando siempre estuvo a su lado y hablaba en la Convención Nacional Republicana.
Ivanka Trump y su esposo Jared Kushner en una recpeción a inicios de año (Fuente: MEGA).
Una rubia multifacética
Hoy en día, hace publicaciones ‘relatables’ en Instagram. Las idílicas vacaciones de verano en Bedminster, Nueva Jersey. Los niños en equipo de motocross en el Miami Motocross Park. Se la ve llevando a los niños a jiu jitsu, a la playa y en citas con Kushner. Pero no se trataría del estereotipo de la rubia elegante y sonriente del sueño americano. Ivanka no ha dejado los eventos sociales. Se la vió, por primera vez, en el show tributo a Virgil Abloh de Louis Vuitton en Art Basel Miami en diciembre de 2021, con un vestido rosa chicle y tacones blancos de charol, adelantándose en la fila del baño. En 2023, estaba firmemente de vuelta en la lista de invitados: fotografiada en la fiesta de cumpleaños de Kim Kardashian con el set de multimillonarios, incluida Lauren Sanchez, en Los Ángeles. Finalmente, en 2024, la hija de Donald Trump estuvo en la opulenta fiesta previa a la boda de los Ambani con su esposo e hijos, luciendo esmeraldas rusas, esmeraldas de Zambia, diamantes cortados y sin cortar y oro de 18k de Manish Malhotra.
Ivanka Trump en el podcast de Lex Fridman (Fuente: The Lex Fridman Podcast).
Entrevista con Lex Fridman
El 2 de julio, llegó su primera aparición en los medios: una entrevista de tres horas con Lex Fridman. Un podcaster y amigo. Perfectamente pulida, agudamente inteligente, se deslizó por la entrevista con su brillo característico. Principalmente hablaron de filósofos y arquitectura y construcción, pero luego llegaron a la política. “Pasé cuatro años en Washington. Siento que dejé todo en el campo. Me siento realmente bien al respecto y me siento muy privilegiada de haber podido hacer lo que hice”, señaló Ivanka.
J. D. Vance y Donald Trump conversan. Al fondo, Usha Vance, Ivanka Trump y Melania Trump en la Convención Republicana de Milwaukee (Fuente: Associated Press).
El atentado contra Trump y la Convención Republicana
Después de eso, llegó la confirmación de que Ivanka asistiría a la Convención Nacional Republicana en Milwaukee para apoyar a su padre mientras acepta la nominación oficial el jueves 17 de julio. Sus portavoces se apresuraron a negar que ella haría un discurso (de hecho, no lo hizo). El regreso estaba en marcha; y luego, el sábado, se produjo el intento de asesinato contra su padre. En una escena icónica, el expresidente cae al suelo durante un mitin en Pensilvania, con sangre brotando de la parte superior derecha de su oreja. Menos de un minuto después, empuja su cara y su puño entre los seis agentes del servicio secreto que lo rodean, golpea el aire y grita – con una claridad inconfundible: “Fight! Fight! Fight!“.
Donald Trump e Ivanka Trump en 1990 (Fuente: Getty Images).
Donald e Ivanka
El primer tuit, de Ivanka no tardó en llegar: “Te amo, papá, hoy y siempre. Gracias por tu amor y oraciones por mi padre y por las otras víctimas de la violencia sin sentido de hoy en Butler, Pensilvania. Estoy agradecida al Servicio Secreto y a todos los demás oficiales de la ley por sus rápidas y decisivas acciones hoy. Sigo orando por nuestro país”. Tras hablar con él por teléfono mientras estaba en el hospital el sábado por la noche y fue la primera a su lado al llegar del hospital a su club de golf Bedminster en Nueva Jersey, donde se recuperaría antes de Milwaukee. Mientras un Trump celosamente confiado, eligió a J. D. Vance como su compañero de fórmula, podría requerirse de una figura femenina como compañera en las boletas. Por su parte, Ivanka conecta la retórica MAGA de su padre con la rama más progresista del Partido Republicano.
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