El emprendedor textil Rodrigo Higueras transformó su amor por el Perú en un negocio textil de diseño minimalista
Por Nahir Cárdenas Fotos Briam Espinoza
¿Quién diría que un abogado acabaría diseñando ropa? En 2020, en plena pandemia, el limeño Rodrigo Higueras dejó la asesoría jurídica para adentrarse en el mundo de la moda. Con una visión audaz fundó Qénido, una marca con un concepto de «moda minimalista andina» que se posicionó rápidamente en el mercado turístico y, actualmente, está conquistando corazones más allá de nuestras fronteras.
De la jurisprudencia a la moda
Rodrigo, quien estudió derecho en la Universidad de Lima, descubrió que su verdadera vocación estaba lejos de la jurisprudencia. «Me di cuenta de que no era mi verdadera pasión y no me veía trabajando en un bufete de abogados toda la vida», confiesa. Esta revelación lo llevó a emprender un viaje que cambiaría su rumbo profesional.
«Me voy de mochilero a la India», decidió Rodrigo en 2019, llevando consigo una pequeña llama de peluche que se convertiría en la inspiración para su marca. «Me di cuenta de que la gente reaccionaba con asombro, diciendo ‘¡Wow, qué es eso!'», recuerda. Esta experiencia sembró la semilla de lo que se convertiría en Qénido.
La llama como símbolo peruano
El logotipo de Qénido, una llama estilizada, tiene una inspiración sorprendente. «La llama está inspirada en ‘Las locuras del emperador’, la película de Disney donde el emperador Kuzco se transforma en una llama», revela. Esta elección ha demostrado ser un acierto en el mercado turístico.
Pues, pese a ser una marca relativamente nueva, Qénido ha crecido exponencialmente, con presencia en lugares emblemáticos como el Museo Larco y hoteles Selina. «La gorra se ha convertido en un fenómeno, no solo a nivel nacional, sino internacional», afirma. La popularidad de sus productos ha llevado a turistas a buscar la tienda «Cada dos días, llegan grupos de turistas al showroom con la misma historia: ‘Vimos tu gorra en Aguascalientes, le tomamos una foto, buscamos en Google y aquí estamos'».
Este éxito no se limita a un solo producto. Qénido ofrece una variedad de prendas, todas con el distintivo diseño minimalista andino que ha cautivado al público. La marca opera principalmente a través de canales online y un showroom, ofreciendo una experiencia única al cliente.
Superando desafíos
El camino de Qénido no ha estado exento de obstáculos. En octubre de 2023, la marca estuvo cerca de la quiebra. Sin embargo, la perseverancia de Rodrigo logró superar esta crisis. «Todo lo aprendí sobre la marcha, preguntando y cometiendo errores», admite Rodrigo. «Nunca imaginé que tendría una página web, me parecía algo inalcanzable». Hoy, Qénido no se limita a sobrevivir, sino que prospera y tiene ambiciosos planes de expansión.
Un legado familiar con visión internacional
El trasfondo diplomático de su familia ha influido en la visión internacional de Rodrigo. «Mi abuelo fue embajador, mi papá es diplomático, mi hermano es diplomático», comparte, explicando cómo esta dispersión familiar ha ampliado su perspectiva global.
Aunque decidió no ser optar por ese rumbo, confiesa: «Qénido es mi forma de representar a Perú». Con su compromiso por la calidad y el diseño minimalista andino, Qénido se perfila como una embajadora moderna de la cultura peruana en el mundo de la moda internacional.
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