Ante las críticas y las desafortunadas declaraciones de la protagonista, la productora anunció que no van a haber entrevistas en el estreno de la película. Además, el hijo de uno de los ilustradores de la «Blancanieves» original se pronuncia la respecto.
Por Redacción COSAS
Disney se encuentra en el centro de la polémica con el nuevo remake de «Blancanieves«, que llegará a los cines el 21 de marzo. Rachel Zegler, quien interpreta a la protagonista, no cantará el clásico «Some Day My Prince Will Come», sino una nueva canción titulada «Waiting on a Wish«, reflejando un enfoque más independiente de su personaje. Sin embargo, la película generó controversia desde su anuncio, y su estreno estará marcado por la ausencia de entrevistas en la alfombra roja, una decisión que, según Variety, busca evitar preguntas incómodas sobre la reacción negativa que ha acompañado al proyecto.
Rachel Zegler en el estreno de «Blancanieves» en Segovia. (Créditos: Instagram/@disneystudios)
Las declaraciones de David Hale Hand
Disney enfrenta críticas por sus recientes apuestas en diversidad e inclusión, incluyendo advertencias de contenido en clásicos como «Dumbo« y la promoción de nuevas narrativas en sus películas. Sin embargo, la controversia en torno a «Blancanieves» comenzó cuando Zegler expresó su descontento con la historia original de 1937. “La trama se centra demasiado en su historia de amor con un hombre que literalmente la acecha. Es raro. Así que no hicimos eso esta vez”, declaró en 2022. También enfatizó que su Blancanieves no soñará con un príncipe, sino con convertirse en una líder.
Las declaraciones de Zegler molestaron a David Hale Hand, hijo del animador que dirigió la versión original. “La película original era como debía ser. Por lo que he leído, [la nueva versión] no guarda ninguna relación con la historia original”, afirmó Hand, de 93 años. “Está tan fuera de lugar que es ridículo”. De hecho, aseguró que los cambios en la película serían suficientes para hacer que su padre y Walt Disney “se revolvieran en sus tumbas”.
Su esposa, Sandra Hand, compartió su indignación: “Han tomado [la historia] y la han llevado a la política de lo woke… Están tomando un relato hermoso y bellamente dibujado y destruyendo lo que era Blancanieves”. También cuestionó por qué Disney no creó un personaje diferente en lugar de modificar la historia clásica. “¿Por qué no pueden simplemente dejarla en paz en lugar de inventar una historia diferente? Que hagan un personaje totalmente distinto”, dijo. “El padre de David sentía un gran orgullo por la película y diría: ‘¿Qué han hecho?’”.
Escena en la que la princesa canta «Whistle while you work» de la película original.
Las críticas a la película
La controversia se intensificó cuando imágenes del rodaje mostraron a los enanitos representados por actores de diferentes estaturas y géneros, lo que llevó al actor Jason Acuña, conocido como “Wee Man” en «Jackass», a criticar la decisión: “Están quitando trabajos a personas de baja estatura. La historia es «Blancanieves y los siete enanitos», no «Blancanieves y siete personas promedio”.
El uso de CGI para los nuevos enanitos también desató reacciones negativas, aunque The Hollywood Reporter informó que el director Marc Webb siempre tuvo esa intención. A estas críticas se sumó Peter Dinklage, quien acusó al estudio de hipocresía: “Se enorgullecen de elegir a una actriz latina para Blancanieves, pero siguen contando la historia de Blancanieves y los siete enanitos”.
Así se veían los siete enanos del nuevo remake.
Declaraciones de Rachel Zegler
Las posturas políticas de Zegler fueron otro punto de controversia. La actriz expresó abiertamente su apoyo a «Free Palestine« y generó indignación tras desear en Instagram que Donald Trump y sus seguidores “nunca conocieran la paz” luego de su derrota ante Kamala Harris en noviembre pasado. Según un informante de Page Six, Disney le pidió a Zegler moderar sus publicaciones, pero ella se negó.
La polémica también rodea a Gal Gadot, quien interpreta a la Reina Malvada y es una firme defensora de Israel. Su presencia en los Oscar generó una carta abierta pidiendo que fuera retirada del evento. Aunque la petición no se presentó formalmente, Gadot se enteró antes de subir al escenario. “Ha manejado todo con dignidad, pero es doloroso”, dijo una fuente de Hollywood.
Disney optó por estrategias de promoción alternativas, como entrevistas con influencers en lugar de prensa tradicional. A medida que la empresa reconsidera sus iniciativas de diversidad, queda por ver si «Blancanieves» será un éxito o un recordatorio de los desafíos de su nueva dirección.
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