María Belén Bazo se encuentra en Tarifa, al sur de España, entrenando intensamente nada menos que con la española Marina Alabau, campeona olímpica de Londres 2012 en la disciplina de windsurf, con vistas a las competencias que tendrá que enfrentar este año. El próximo campeonato que disputará será en Palma de Mallorca, entre el 23 y el 27 de este mes, aunque asegura que los resultados, en este momento, son lo de menos. “Mi objetivo este año no es ganar todos los campeonatos, sino adquirir experiencia aprendiendo de las mejores. La diferencia entre las categorías Juveniles y Mayores es muy grande, no solo por la experiencia de las competidoras, sino también por los equipos, los entrenadores, la logística. Y yo quiero estar a ese nivel”, señala María Fernanda.
María Belén empezó a competir en la categoría de Mayores el año pasado.
La navegadora ha conseguido resultados realmente importantes a lo largo de su corta carrera. Tiene dieciocho años y practica el deporte desde los doce. En 2014 ganó su primer Campeonato Sudamericano Juvenil en Buzios, Brasil; y repitió el oro en el 2015 en Paracas y en el 2016 en Sao Paulo. “Mi mejor logro”, afirma, “ha sido la medalla de bronce que conseguí en el Mundial Juvenil ISAF de Nueva Zelanda”, que se llevó a cabo en diciembre del año pasado. “Este campeonato es de los más importantes, porque participan todas las clases de vela: fue un gran logro para mí”.
La velerista ha empezado su participación en la Copa del Mundo de Vela en categoría Mayores, que tiene tres fechas a lo largo del año y en las que participan cuarenta deportistas. La primera, en enero, tuvo lugar en Miami, y Bazo mostró un buen desempeño. La segunda se llevará a cabo en Hyères, Francia, a partir del 23 de abril, por lo que estará entrenando en Marsella unos días antes; y la última jornada será en Santander, España, a partir del 4 de junio.
Bazo también piensa postular a la universidad para estudiar la carrera de Psicología.
Sin embargo, la meta a largo plazo es la que parece tentar más a María Belén: en 2020 podría tener la oportunidad de representar al Perú en los Juegos Olímpicos de Tokio. “Mi objetivo es llegar a Tokio y conseguir una medalla”, dice Bazo sin titubear. “Los clasificatorios comienzan recién en el 2018, pero para estar al nivel tengo que prepararme desde el día de hoy, y de hecho vengo haciéndolo desde hace varios años”. Antes de Asia, tendrá que hacer una escala en Lima, siempre y cuando los Juegos Panamericanos de 2019 se lleven a cabo.
Está claro que María Belén tiene todo el talento necesario, y que la dedicación puesta en su preparación está mostrando frutos. Más que una esperanza, es una realidad del deporte nacional y sudamericano, y ya se está metiendo entre las mejores del mundo, dejando en alto el nombre del Perú.
Quedó tercera en el Mundial Juvenil de Nueva Zelanda 2016.
LA IMPORTANCIA DE UNA BUENA DIETA
María Belén puso énfasis en la importancia no solo de entrenar duro y parejo, sino también en seguir una buena alimentación. “Trato de comer lo más saludable posible”, dice, “leo mucho sobre el tema. Cuando siento que me falta energía, busco qué es lo más saludable para tener más fuerzas, y en general trato de que no sean productos demasiado procesados. Por el contrario, busco que sean amigables con la naturaleza”.
“Recién he comenzado a consumir proteínas naturales este año”, agrega, “porque sentía que me quedaba sin energía, que me faltaban fuerzas y masa muscular y, ya que ahora compito en Mayores, donde todo es más complicado y hay más competencia, debo estar siempre al 100%”, finaliza.
Por Dan Lerner
Fotos de Lucero del Castillo
Publicado originalmente en COSAS 614
