En más de una ocasión Meghan Markle ha sido comparada con Lady Di, ya sea por sus looks o por su labor altruista. Sin embargo, ha surgido una nueva similitud entre la madre y la esposa del príncipe Harry y que podría poner en peligro a la ex actriz. Ken Wharfe, ex guardaespaldas de Diana de Gales indicó que el afán de la duquesa de parecerse a su suegra podría ponerla en un grave peligro.
Meghan Markle ha demostrado su interés por mantener una cercanía con el público durante sus actos oficiales. Sin embargo, esto supone un gran peligro para su seguridad y lo advierte el mismísimo ex guardaespaldas de su suegra y madre del príncipe Harry, Diana de Gales.
Por medio de una carta para Daily Mail, Ken Wharfe advirtió que el comportamiento de Markle, tan parecido al de la princesa, puede ponerla en grave peligro. “A la duquesa parece gustarle mezclarse con el pueblo durante sus compromisos públicos, demostrando así que es una más, y le incomoda la presencia de un oficial de seguridad”, escribió Wharfe.
El hombre que se encargó de proteger de cualquier ataque y atentado a Lady Di durante ocho años dice sentir solidaridad con la ex jefa de seguridad de la duquesa de Sussex, quien renunció a su cargo hace unos días luego de seis meses de trabajar con ella.
“Diana no era una jefa fácil. Como a Meghan, le gustaba acercarse a la gente y llevar una vida lo más corriente posible”, dice Wharfe.
Uno de los incidentes más recientes y que podría ejemplificar lo que el ex agente de Diana trata de explicar, es lo que pasó durante uno de los actos del reciente tour por Australia y Oceanía de los duques de Sussex. Meghan tuvo que ser evacuada por su guardaespaldas entre la multitud que se había amontonado para saludarla en un mercado de Fiji.
“Siento empatía por la joven oficial de policía que ocupó los titulares cuando sacó a la duquesa de Sussex fuera de peligro en una visita al extranjero, y que ahora decide renunciar a su papel”, agregó el detective.
Por otro lado, también se atrevió a opinar sobre las medidas de seguridad que se pudieron haber tomado para evitar el incidente. “En mi opinión, se deberían haber colocado vallas. Sabían que el interés por ver a la duquesa era enorme. Estaba embarazada y acababa de casarse”, dijo Wharfe. “Además, ¿por qué había tan poca seguridad alrededor del auto? Fue una falta general de experiencia”, agregó.
Una duquesa difícil
Existen muchas especulaciones sobre la renuncia de la agente de seguridad de Meghan. Algunos dicen que fue precisamente por el incidente en Fiji, y otros que dicen que la duquesa es una persona con la que es difícil trabajar.
La asistenta personal de la ex actriz, Melissa Touabti, abandonó su cargo también, y la secretaria personal de la pareja, Samantha Cohen, se prepara para dejar el trabajo (anunciado esto como algo temporal) después de 17 años al servicio de los Windsor.
Según informó una fuente a The Sunday Times, a Meghan le estaría costando mucho acostumbrarse a las estrictas normas de seguridad. El deseo de Markle de ser vista como “una persona normal” significa un problema para su equipo de protección personal y es que “en su rol actual no puede ir a ninguna parte sin ellos y eso es un gran poder restrictivo para una persona como ella”.
Asimismo, según informaron fuentes cercanas a la pareja a Daily Mail, “a diferencia de alguien que creció en la familia real y se acostumbró a tener una protección cercana desde una edad temprana, esto puede ser bastante restrictivo”.
