Luego de su regreso al Principado, la princesa Charlene habría viajado hacia Suiza, donde estaría recuperándose en una exclusiva clínica especializada en salud mental. 

Por Arianna Gonzáles

Charlene de Mónaco y Albert de Monaco

Alberto de Mónaco junto a su esposa Charlene, cuando protagonizaban alfombras rojas de eventos públicos.

La ubicación, así como el estado de salud de Charlene de Mónaco, se han convertido en un misterio que se presenta como la base de diversas especulaciones.

Tras regresar a Mónaco desde Sudáfrica, donde estuvo cerca de seis meses, el Principado comunicó que la princesa se ausentaría y enfocaría en la búsqueda de su recuperación, por lo que no acudiría a los eventos programados en su agenda.

El comunicado del Palacio no indicaba dónde pasará Charlene los próximos meses. Sin embargo, el príncipe Alberto confirmó que su esposa no se encuentra en la residencia real, sino que está recuperándose en una clínica.

La inquietud por el misterio que rodeaba la ubicación de la princesa acaparó los medios monaguescos, hasta que el último fin de semana, el portal Birds Daily reveló que la clínica donde Charlene estaría internada está ubicada en Suiza, precisamente en Zúrich.

El centro hospitaliario elegido para acoger a la esposa de Alberto de Mónaco se llama Paracelsus Recovery, y es bien conocido por la familia real ya que algunos de sus miembros han pasado temporadas ahí.

Según la información recogida por Birds Daily, la clínica es especialista en el tratamiento de adicciones y problemas de salud mental, con una atención personalizada y discreta, por ello, habría representado la primera opción para Charlene.

A su vez, la exclusividad es una de sus consignas:  los tratamientos pueden llegar a costar hasta 350.000 euros y sus habitaciones cuentan con más de 250 metros cuadrados y vistas al lago de Zúrich.

Lucha contra los rumores

Jacques y Gabriela de Mónaco en las celebraciones por el Día de Mónaco.

Sin embargo, a pesar de que Alberto de Mónaco haya declarado en varias oportunidades frente a cámaras que lo que aleja a Charlene de su hogar es su enfermedad, los últimos meses han estado llenos de rumores sobre una posible separación de la pareja.

“No es Covid. No se trata de cáncer. No es un problema personal. Y no se trata de una cirugía plástica. Su mal no es sólo físico por eso necesita mucha tranquilidad y soledad para recuperarse. Estaba cansada y no era del todo ella misma”, aseguró Alberto para desbaratar las especulaciones que cada vez se hacen más fuertes.

Incluso, a manera de homenaje familiar, Alberto y sus hijos, los mellizos Jacques y Gabriela, que están próximos a cumplir 7 años, hicieron una aparición en el balcón con carteles en los que se leía “Te extrañamos, mami”.

Los hermanos, que tienen acostumbrado ser bastante amigables durante sus apariciones en público, esta vez tenían una mirada seria y triste. Sin duda, la separación de su madre por cerca de seis meses ha influido en ellos y hoy más que nunca necesitan volver a tener a su familia unida.

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