La decisión tomada por el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle de apartarse oficialmente de la Casa Real, podría acarrearles también el perder una ingente fuente de ingresos de parte de la corona británica.
Para la díscola pareja, el renunciar a sus amados privilegios como lo hicieron saber, los llevaría a un radical cambio en sus finanzas, ya que podrían perder unos US$ 2,6 millones, cantidad que la Casa Real les destinaba anualmente para sus gastos, tal como lo asegura el portal Daily Mail. Dicho medio también considera que el tema ya habría sido considerado por Harry y Meghan, quienes habrían recibido una dura fiscalización de parte de los medios de comunicación por los gastos de sus viajes al extranjero. En dicho contexto, ¿cómo pensaban solventar su nueva vida en Canadá? Ya que si pensaban comprar un inmueble en Toronto tendrían que hacerlo de su propio bolsillo y a sabiendas que es la segunda urbe más cara de ese país.
Cuna de oro
Una respuesta podría estar en los patrimonios personales de ambos, los que estarían estimados en el caso de Harry en US$ 39 millones (26 de los cuales heredó de la princesa Diana), mientras que Meghan tendría unos US$ 5 millones. Con dichos fondos, los duques de Sussex tendrían que atender los gastos de su seguridad personal, que normalmente bordea los US$ 131,000 anuales y que eran costeados del bolsillo de los contribuyentes. Eso sin contar a sus sirvientes y asistentes personales, cuyo costo suele alcanzar la generosa suma de US$ 39,000. Aunque otra especulación del Daily Mail considera que es poco probable que la reina Isabel II o el príncipe Carlos les corten los recursos a Harry, el tema promete tener para varias entregas aún y con mayor expectativa que la misma serie televisiva The Crown, basada en la realeza británica.