En el valle de Chanchamayo predomina el verde. Pero entre toda la vegetación selvática, hay un rincón lleno de colores, aquel en el que se ubica la comunidad asháninka de Marankiari. Por ahí pasó la Ruta P9, diseñada por Huawei en colaboración con PromPerú, y sus viajeros pudieron comprobar algo: en el corazón de la selva no sólo se danza con los pies, sino también con el alma. Y esto le quedó especialmente claro a Franco Cabrera. El actor y comediante se vistió como uno de los nativos, se unió al grupo, se dejó llevar por los cantos y los sonidos de la percusión y, sin conocer los patrones ni saberse los pasos, comenzó a improvisar y se convirtió en uno más dentro del rito. En medio de esa catarsis corporal vio que el escritor español Benjamín Prado tenía razón al afirmar que «si empiezas a bailar, la música irá a buscarte».
Conversamos con Franco acerca de esta experiencia, que además lo hizo pasearse por distintos destinos de la sierra y la selva peruana.
¿Qué esperabas de estos destinos antes del viaje y qué encontraste?
Yo esperaba lo de siempre: belleza natural, fauna, flora, buenos cielos, gente muy amable, buena comida. Y encontré todo eso. Sin embargo había algo un poco más onírico que yo sentía apenas pisaba cada uno de estos lugares. Sentía una calma interior producto de la atmósfera de cada lugar, del vínculo que desarrollaba inmediatamente con la tierra y con el clima que respiraba. Eran cosas que no había ni soñado ni imaginado. Estar ahí y respirar paz y darme cuenta de dónde venimos es un regalo que me dio este viaje.
¿Qué otras cosas te dejó aparte de esa experiencia?
Fue un viaje agotador e intenso. Y eso hizo que recuerde bastante cada uno de los lugares. Pero también me dejó muchas enseñanzas. Entendí, por ejemplo, que los problemas personales son minúsculos. Y eso ocurrió porque encaré una realidad mucho mayor. Cosa que no sucede en la urbe, porque hay mucho cemento. En cambio ahí te das cuenta que eres un solo individuo que representa un porción muy pequeña de todo lo que estás viendo. Y eso me hizo disfrutar más. Disfrutar con el corazón y con el alma.
¿Te dejó con más ganas de viajar?
Sí, me dejó el deseo de seguir viajando. Yo viajo mucho pero no conozco Europa. Y ese era uno de mis objetivos. Pero ahora, luego de la Ruta P9, me he propuesto conocer cada una de las regiones del país antes de ir a Europa. Eso implica agilizar mis viajes para luego poder cruzar el charco.
¿Qué le recomendarías a alguien que quiere hacer un viaje parecido a la Ruta P9?
Que escuche mucho las recomendaciones de la gente del pueblo, que viven años de años ahí. Y en los niños también, que conocen cada recoveco porque juegan por todas partes. También recomendaría que vayan a un mercado, que es algo que yo siempre hago, porque ahí está la esencia de cada pueblo. Y, si es posible, que coman un plato típico del lugar para que saboreen también su cultura.
¿Cuál fue el destino que más te gustó?
Estoy más que seguro que Lampa. Tenía mucha cultura. Saber que Humareda nació ahí me vinculó más al lugar, porque me gusta mucho su arte. El recibimiento fue muy amigable, muy afable. La comida estuvo buenaza. El pan de Lampa estuvo espectacular. De hecho lo primero que hicimos al llegar fue caminar y paramos a comer alpaca y chuño, para lo cual recibí la guía y la explicación pertinente de Luciano Mazzetti. Y luego de eso pasó algo que no pasó en otros lugares: la gente no reparaba mucho en el hecho de que estuviéramos ahí. Todos vivían su propia vida sin tener que voltear y juzgar a los forasteros que acababan de llegar.
¿Qué tal la experiencia del registro con el P9?
Increíble, increíble. Al regresar a Lima sentí lo que vale el P9 porque sentí la importancia de una buena foto. Muchas personas, gente de mi entorno laboral y familiar, resaltaban el hecho de que las fotos eran hermosas. Se habían quedado admirados por lo que había posteado. Me pedían que por favor les dijera dónde quedaba tal lugar en el que el cielo es tan azul. Ahí te das cuenta que las fotos han plasmado exactamente lo que quería plasmar.
Si tuvieras que definir este viaje con una sola frase, ¿cuál sería?
«Sensaciones varias» (risas).
*Todas las imágenes y videos de esta nota (a excepción del video final) han sido tomadas y/o grabados por el nuevo Huawei P9