Si bien el restaurante Manifesto13 ha abierto hace tan solo siete meses, está dejando a todos boquiabiertos con los platos que sirven. Entérate un poco más acerca del desarrollo de este proyecto con esta conversación con los dos jóvenes peruanos que lo elaboraron.
Por Arantza Miró Quesada
Los peruanos Nicholas y Mark Duncan son dueños de Manifesto13, un restaurante de comida italiana, en Madrid. Llegaron a Madrid hace 11 años pero lanzaron el proyecto recién el diciembre pasado, a los 25 años de Nicholas y 22 de Mark. Con el apoyo de su padre y de su socio Simone, lograron hilar poco a poco lo que se convirtió en un éxito. «Yo acabé el colegio aquí en Madrid, pero estudié la universidad en Inglaterra, después trabajé tres años en Londres, y hace dos volví para montar el proyecto.»
Nicholas nos cuenta que a su hermano menor, Mark, y a él siempre les ha encantado el mundo de la hostelería, y especialmente la gastronomía. «Mi hermano cocina un montón, siempre nos encantó salir a comer. A mi papá le encantaba cocinarnos desde que éramos chiquitos, hacía parrilla todos los domingos. Mi hermano y yo siempre quisimos algún día abrir un restaurante o hacer algo en el mundo de la hostelería.»
Nicholas comenta que la idea de abrir un restaurante resurgió en el cumpleaños de su hermano, cuando anunció que quería montar un restaurante. Al compartir la pasión por el mundo gastronómico, Nicholas se sumó al proyecto y ahí empezó el desarrollo del restaurante Manifesto13.
El restaurante queda en Chamberí, justo al lado de la Alberite de Bilbao. «Es una zona que históricamente siempre ha tenido bastante movimiento, pero solía ser una zona de bares de la esquina, muchas cervecerías con cerveza de todo el mundo, y poco a poco la zona fue ido cogiendo más vida gastronómica, más proyectos interesantes han estado abriendo y, nos mandamos con esa zona, y la verdad que nos ha ido súper, el barrio nos ha tratado súper bien», nos cuentan.
Comenzaron con la idea de abrir una hamburguesería, pero, a medida que fueron observando el plan del proyecto con más detalle, se dieron cuenta que no iba a funcionar. «Empezaron a abrir un montón de hamburgueserías, especialmente smash burgers, cada semana abrían como tres. Competir en un mercado que estaba tan congestionado iba a ser súper complicado».
Este obstáculo terminó siendo un silver lining, a medida que los ayudó a encontrar la idea que se mejor alineaba con la visión que tenían en cuanto a su restaurante. «Una hamburguesería es más un negocio de marketing, que un proyecto gastronómico, y nosotros queríamos enfocarnos más en lo que era la parte gastronómica, y por eso, reconocimos que la hamburguesería no encajaba con lo que nosotros buscábamos».
Nicholas y Mark querían hacer algo parecido a un barra chalaca, pero en Madrid. «Algo que incluya cocina abierta. Siempre nos ha encantado el tema de show cooking, que se vea toda la acción». Los dueños se dieron cuenta que abrir un restaurante peruano iba a ser muy complicado, y comenzaron a pensar en otras alternativas.
Junto a su socio, Simone, plantearon la idea de abrir un restaurante italiano. El enfoque se centraba en romper un poco con la cocina tradicional, modernizar lo que era la tradición de la cocina italiana. «Empezamos a montar este proyecto de una cocina italiana, pero a nuestra manera, y ahí viene como nuestro lema de A modo nostro, que es eso, básicamente», nos comenta Nicholas. Simone, su socio italiano, pudo apoyarlos gracias a su amplia experiencia internacional. Ha trabajado en varios lugares de Europa, realizado prácticas en India y trabajado en numerosos países. Además, vivió varios años en Perú, donde se encargó de la apertura de Troppo en Lima.
Nicholas nos cuenta un poco de cómo nació el nombre del restaurante: «Manifesto es porque era nuestra manifestación de lo que nos representa; queríamos que represente nuestro gusto, nuestra personalidad. Queríamos crear nuestra casa y que la gente venga a disfrutar con nosotros. Entonces, Manifesto es nuestra manifestación de eso». El número 13 salió porque antes de Manifesto, los locales que ocupaban el lugar del restaurante se llamaban Harsenburg número 12 y Harsenburg 14, los cuales se unieron para hacer lo que ahora es Manifesto13.
Si bien los hermanos quieren innovar y romper con el concepto tradicional de la cocina italiana, Nicholas nos cuenta que les parece fundamental que «el proyecto siga manteniendo la esencia de nosotros y la esencia de manifiesto, pero que siga constantemente evolucionando. Nosotros no queremos ser un proyecto estático».
Un consejo que Nicholas le daría a alguien que esté pensando en abrir su propio restaurante es: «no te enamores de tu idea. Tú puedes tener una idea, pero deja que esa idea evolucione, no le tengas miedo al cambio. Y lo que sí es, en todo este proceso de cambio nunca pierdas tu identidad, tu esencia, y nunca te olvides de quién eres y porqué empezaste esto.»
Si estás en Madrid, ya sea de visita o como residente, Manifesto13 es una parada obligatoria que debe estar en tu bucket list gastronómica. ¡No te pierdas esta experiencia culinaria única!
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