Resolución ministerial oficializa nuevo nombre y ordena colocar un busto recordatorio de la destacada carrera internacional de García Belaúnde.

Por Redacción COSAS

El Ministerio de Relaciones Exteriores dispuso que el reciente edificio adquirido de su sede central lleve el nombre de «Embajador José Antonio García Belaúnde», como parte de un reconocimiento institucional a la trayectoria del diplomático. La medida fue oficializada mediante la Resolución Ministerial N.º 0578-2025-RE, y también contempla la colocación de un busto en memoria del excanciller.

El nuevo edificio del Ministerio de Relaciones Exteriores, ubicado en el jirón Santa Rosa, en el Centro Histórico de Lima, será identificado desde ahora con esta denominación, que deberá emplearse en todos los actos oficiales e institucionales. La Cancillería informó que la decisión no generará gastos adicionales al Tesoro Público, al tratarse de una acción simbólica de homenaje.

El recordado y destacado canciller falleció en Madrid en julio a causa de una enfermedad.

José Antonio García Belaúnde falleció el pasado 4 de julio en Madrid, a los 77 años. Su partida generó múltiples muestras de respeto por parte de autoridades nacionales, expresidentes, diplomáticos y organismos internacionales, que coincidieron en destacar su labor como funcionario público y su compromiso con la política exterior peruana.

Una carrera que dejó huella

García Belaúnde asumió como canciller en 2006 y permaneció en el cargo durante todo el segundo gobierno de Alan García, de quien fue muy amigo, convirtiéndose en el único ministro en toda la historia del Perú en completar un quinquenio completo al frente de Torre Tagle. Su paso por la Cancillería marcó una etapa de intenso dinamismo diplomático y de apertura al mundo.

Entre sus principales logros figura la consolidación de tratados de libre comercio con Estados Unidos, la Unión Europea, China y otros países estratégicos, lo que permitió ampliar el acceso de productos peruanos a nuevos mercados y fortalecer la presencia del Perú en la economía global.

Uno de los momentos más trascendentes de su gestión fue el inicio de la demanda marítima contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, proceso que defendió con firmeza y que, años más tarde, culminó con un fallo favorable que reafirmó la soberanía marítima del Perú.

En la sede de Torre Tagle rindieron un homenaje póstumo al excanciller.

García Belaúnde también fue un impulsor clave de la Alianza del Pacífico, bloque regional integrado por Perú, Colombia, Chile y México, que nació con el objetivo de fomentar la integración comercial y política en la región. Su visión integradora y pragmática le ganó respeto dentro y fuera del país.

A lo largo de su carrera, representó al Perú en distintas misiones diplomáticas, tanto en Europa como en América. Antes de ser canciller, fue embajador en España y ante organismos internacionales como la Comunidad Andina. Su nombre quedó asociado a una diplomacia profesional, dialogante y orientada a los consensos.

En 2024, pocos meses antes de su fallecimiento, fue designado presidente de la Fundación EU-LAC, que promueve la cooperación entre la Unión Europea, América Latina y el Caribe, reflejo de su prestigio en los ámbitos multilaterales.

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