Gonzalo Gutiérrez confiesa que está cansado. No obstante, después de una vida dedicada a las relaciones internacionales, admite que más puede el afán de dejar en alto el nombre del Perú que su vida privada. Amante de la natación, el ex canciller de la República durante la administración anterior señala que ya ha identificado una piscina a la que irá a despejarse de las tensiones propias de la vida diplomática, especialmente los temas comerciales, que han jugado un rol clave en las misiones que ha liderado. Hoy, al asumir el nuevo encargo que le ha hecho el presidente Pedro Pablo Kuczynski como embajador Extraordinario y Plenipotenciario del Perú ante la Unión Europea, deberá velar por los intereses del Perú en un contexto en el que el Reino Unido se prepara para  salir del bloque europeo y se prevé una posición proteccionista de parte de Estados Unidos durante la era Trump.

Gonzalo Gutiérrez Reinel fue ministro de Relaciones Exteriores entre junio de 2014 y abril de 2015.

Le ha tocado, por lo general, desempeñarse en el ámbito de las relaciones comerciales. ¿Ha sido casualidad?
Por una razón que no me explico he hecho carrera en embajadas en las que el trabajo alrededor de los asuntos comerciales ha sido intenso. Tuve ocasión de negociar la creación de la Organización Mundial de Comercio hace más de veinte años, en Ginebra; integré parte del equipo que negoció el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos; fui subsecretario de asuntos económicos de la Cancillería; y luego me desempeñé como embajador en China, donde el tema comercial fue uno de los ejes de trabajo.

Precisamente, parte de la agenda de temas importantes como representante del Perú ante la Unión Europea tiene que ver con el comercio. ¿Cuál será el siguiente paso después de la firma del TLC con el Perú?
Diría que profundizar el tratado, para ir más allá de lo comercial, abarcando temas de cooperación política y desarrollo. A futuro, el objetivo debe ser convertir el TLC con la Unión Europea en una puerta para los productos no tradicionales. Por otro lado, debemos analizar la situación de la Unión Europea en el contexto de la decisión británica.

¿Cuál es el rol que debe jugar el Perú en ese contexto?
Preservar los compromisos que hemos asumido con la Unión Europea, y ver cómo estos se deberán adecuar, en términos de parámetros, si se produce la salida del Reino Unido.

A la fecha, ¿cuál es la situación del Reino Unido con respecto a la Unión Europea?
En este momento, la situación es que el Reino Unido pertenece a la Unión Europea. Jurídicamente, la Unión Europea no ha tomado nota de la decisión británica de retirarse del bloque. Es un proceso que tiene implicancias internas, sobre todo ahora que un sector ha promovido un fallo judicial que establece que el Parlamento británico deberá expresarse a favor antes de que se haga oficial el pedido. Ese debate tiene lugar ahora mismo. Pero, asumiendo que se mantuviera la decisión, el Perú deberá velar para que se preserven los mismo derechos que se tenía como integrante de la Unión Europea.

Es decir, un TLC bilateral…
Un tratado de cooperación comercial y, si es posible, un acuerdo político y de cooperación técnica.

¿Sería una negociación desde cero, como está ocurriendo ahora con la India?
No lo creo. Aunque todavía estamos en el terreno de la especulación, porque aún no se produce la salida del Reino Unido, pero, suponiendo que se dé, tenemos una base clara y sustentada a la que se llegó en el TLC con la Unión Europea, que deberá facilitar el llegar a un mantenimiento o a una mejora en el acceso de productos peruanos al mercado británico.

“Donald Trump es el líder de Estados Unidos y tiene mucho que decir y decidir en un acuerdo de comercio como este, pero tampoco el comercio internacional se agota en el TPP”.

Como ex embajador del Perú en China, ¿cómo ve la posible salida de Estados Unidos de APEC y la arenga del gobierno chino a favor del libre comercio global?
Tenemos que esperar a ver qué ocurre. El Perú, desde hace décadas, ha decidido sustentar su interrelación con el comercio global a partir de la firma de tratados de libre comercio, integrándose con los tres principales bloques: América del Norte, Asia y la Unión Europea. No se trata de darle preferencia a uno u otro, pero si uno provoca un desbalance y cobra importancia otro pilar, deberemos actuar según nuestros intereses comerciales. Hoy, China es nuestro principal socio comercial, pero básicamente para minerales y harina de pescado. Debemos migrar a un esquema comercial que incluya nuestros productos no tradicionales.

El presidente Kuczynski viajó a China para ver si es posible sumar más inversiones…
La visita del presidente Kuczynski a Shanghái y la visita del presidente Xi Jinping al Perú fueron un acierto. El gobierno busca ahora diversificar la canasta exportadora para sumar más productos, así como nuevos ejes para la inversión china en el Perú, para que las industrias chinas puedan establecerse aquí, a darle valor añadido a nuestra exportación de minerales, y que participen en el desarrollo de infraestructura y acceso de productos. Ya ingresan los arándanos y los langostinos al mercado chino. Más tarde serán otros productos.

Por Luis Felipe Gamarra
Fotos de Erick Andía

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