El escritor y periodista peruano acaba de publicar «Algún día te mostraré el desierto», un diario de paternidad en el que explora lo que representó para él convertirse en padre después de los 40 años. Cisneros presentará su más reciente publicación en la Feria Internacional del Libro de Lima 2019. 

Por María Alejandra López

Tu nuevo libro llega dos años después de “Dejarás la tierra”. Se podría decir que mantienes un ritmo constante de publicaciones desde 2010. ¿Cómo logras mantenerte vigente? ¿Alguna vez pensaste que publicarías solo un gran libro?

No escribo para mantener vigencia ni para cumplir un cronograma. Escribo lo que necesito escribir; no lo que quiero, no lo que me piden, no lo que se espera. Solo lo que necesito. Además, el ritmo de escritura y de publicación no siempre coinciden. El año pasado Random House publicó un libro de relatos («Cosas que no hay que contar») que yo había escrito mucho tiempo atrás. Por último, me mudé a España, entre otras cosas, para dedicarme a la literatura, así que eso es lo que hago. Felizmente he logrado sintonizar mis urgencias con el interés de los editores.  

El tema de la paternidad es constante en tu obra, y en tu próximo libro la abordas de una forma más íntima. ¿Qué te motivó a publicar este diario?

Sentir felicidad y miedo ante la paternidad. Saber que los cambios eran inminentes e intuir que alterarían mi espacio vital. Eso me motivó, o más bien me arrastró a escribir. En el diario me desahogaba de los pensamientos que, por precaución y solidaridad, no podía compartir en ese momento con mi esposa.

El último libro de Renato Cisneros, «Algún día te mostraré el desierto» (Alfaguara, 2019), ya se encuentra a la venta. También se encuentra disponible en Storytel en formato audiolibro.

¿Podrías contarnos cuál es la crisis a la que haces referencia en tu post de Faceboook?

El post es una invitación a leer el libro. Ahí cuento y explico todo.  

Hace unos meses, un amigo del trabajo que acaba de ser papá me confesó que recién cayó en cuenta de que era padre el día que nació su hijo. En tu caso, ¿podrías decir que te ocurrió algo similar?

A veces ocurre antes, otras veces después. Depende del temperamento, de las convicciones, de la historia de la cual venga cada uno. Hay días en que soy más consciente de la paternidad, de la responsabilidad que implica ayudar a mi hija a descubrir el mundo de la manera más armónica posible. Cuando la tuve en brazos por primera vez, me desarmé. El recién nacido parecía yo.

En “Guía del mal padre”, el dibujante canadiense Guy Delisle aborda pasajes de su paternidad con humor y sarcasmo. ¿También te estás tomando la paternidad con humor y sarcasmo?

Hay páginas del libro que son enteramente sentimentales, pero hay otras donde la ironía se abre paso para rebajar la ansiedad del narrador. El humor, como se sabe, es un mecanismo de defensa que sirve para enfrentar lo que se desconoce, para desactivar la solemnidad. La paternidad ataca tus convicciones, tus certezas, tu identidad. Todo cambia cuando sabes que vas a reproducirte. Uno también aprende a reírse de cómo ese mundo anterior se viene abajo, colapsa.

Renato Cisneros se convirtió en el padre de Julieta en 2017.

Si bien hay varios libros conocidos de escritores que abordan la figura paterna, recuerdo muy pocas publicaciones de hombres que aborden sus roles como padres. ¿Encontraste algunas publicaciones de ese tipo?

Menciono algunos en mi diario: «Una cuestión personal», de Kenzaburo Oe; «Veinte días con Julian y Conejito», de Nathaniel Hawthorne; «La Hora Violeta», de Sergio del Molino; «Quieto», de Màrius Serra; «Mortal y Rosa», de Francisco Umbral; «Hacia el amanecer», de Michel Greenberg; o «Noches azules», de Joan Didion. Es curioso: la mayoría habla de sus hijos enfermos o muertos. Hay pocos libros literarios (o quizá no busqué lo suficiente) donde la paternidad es solo motivo de celebración. Se me ocurre uno: «Demasiada responsabilidad», de Enrique Planas.

Dentro de unos meses, se estrena la película de “Busco Novia”. ¿Qué expectativas tienes de ver tu famoso blog/libro llegar a las pantallas del cine?

Me da mucha curiosidad ver cómo ha sido interpretado el guión. No se trata propiamente de una comedia, sino de una película —con tintes cómicos— sobre la identidad, la vocación y la búsqueda de uno mismo. Me gusta mucho el elenco de actores escogido y creo que los espectadores, sobre todo aquellos que eran asiduos lectores del blog, van a pasarlo muy bien viéndola.

Tengo entendido que escribiste el guion junto a Percy Chávez Alzamora. ¿Ese trabajo representó tu primer guion o ya habías escrito uno antes?

Percy ha escrito varios guiones, tiene mucha experiencia, pero para mí fue la primera vez. La gran diferencia con los libros es que aquí tienes poco control sobre el resultado final: el guión que entregas luego es intervenido por el director, los actores, el montajista, etcétera. Igual, la experiencia ha sido interesantísima. Me gustaría pulir la técnica y escribir más guiones. Con Percy tenemos algunos proyectos en marcha.

¿Consideras que un blog como el de “Busco Novia” tendría la misma acogida en 2019?

Sería imposible. Los blogs murieron hace tiempo; solo se mantienen vigentes aquellos que resultan utilitarios. «Busco Novia» era solo un diario de entretenimiento que tenía sentido en ese momento, 2007, 2008. Hoy tendría que competir con series y youtubers, y seguramente perdería. Lo que no ha cambiado es el tema de fondo: la gente sigue teniendo problemas para establecer relaciones, para encontrar una pareja afín, para expresar lo que siente. Esa dificultad jamás pasará de moda.   

¿Cómo hubiera sido “Busco Novia” de existir Tinder?

Un blog porno.