Casado con Kyle Redford y padre de dos hijos, ha fallecido a los 58 años. Deja una obra de documentales de gran valor sobre la salud y el medioambiente como Happening: A clean energy revolution (2017).
Por Mariana Valle
James Redford ha fallecido este viernes. Vivía en el condado de Marin, en California, junto a su esposa Kyle Redford, una conocida profesora y escritora sobre educación. Fue ella quien hizo pública la triste noticia: “Jamie ha muerto hoy. Estamos desconsolados. Vivió una vida hermosa e impactante y fue amado por muchos. Lo extrañaremos profundamente. Como su esposa desde hace 32 años, estoy muy agradecida por los dos hijos espectaculares que criamos juntos. No sé qué hubiéramos hecho sin ellos durante los últimos dos años”.
Jamie died today. We’re heartbroken. He lived a beautiful, impactful life & was loved by many. He will be deeply missed. As his wife of 32 yrs, I’m most grateful for the two spectacular children we raised together. I don’t know what we would’ve done w/o them over the past 2yrs. pic.twitter.com/ynDN2jSZ04
— kyle redford (@kyleredford) October 16, 2020
James Redford y Kyle, su pareja desde la universidad, son padres de Lena y Dylan Redford. Ambos hermanos también tienen carreras relacionadas con el cine. Su familia y su trabajo fueron las dos pasiones que marcaron la vida del hijo de Robert Redford. De él heredó su pasión por el cine y un gran interés por la preservación del medio ambiente, activismo que ha motivado buena parte de la trayectoria profesional de la estrella de Hollywood ya retirada de la primera línea de la actuación.
James Redford: Un legado encomiable
Esta necesidad por contar historias que impacten y que hablen de lo que sufre la naturaleza como consecuencia de la sobreexplotación del ser humano movió a padre y a hijo a fundar en 2005 The Redford Center. La organización sin ánimo de lucro está dedicada a producir y financiar proyectos “que tienen como objetivo equilibrar la narrativa ambiental omnipresente y alarmista con historias que presentan a personas, comunidades y organizaciones que toman medidas para proteger y restaurar el planeta”, describe en su página web.
A través de ella han producido Happening: A clean energy revolution (2017) un viaje a través de Estados Unidos en busca de reducir la dependencia del país de los combustibles fósiles. O Raise the River vs. Move the Ocean (2018) sobre el delta del río Colorado que en la actualidad se seca antes de llegar al Golfo de California. Estas piezas buscan unir a gobiernos, universidades y comunidades locales de México y Estados Unidos para proteger y restaurar el hábitat y recuperar el recurso vital que ha sido hogar de pueblos indígenas cuyo sustento y cultura dependen de que este sea un ecosistema saludable.
La primera de las cintas relacionadas con el medio ambiente en las que se involucró James, Mann v Ford (2011) cuenta cómo un vertedero de desechos tóxicos afectaba a la vida y a la salud de los habitantes de Ringwood en Nueva Jersey.
Por el avance de la ciencia y la medicina
Nacido en Nueva York en 1962, se graduó en la Universidad de Colorado en Literatura y Cine y completó sus estudios en Northwestern. Dedicó su vida a apoyar principalmente causas relacionadas al medioambiente, la salud y la educación. Junto a Karen Pritzker lanzó el Centro de Yale para la dislexia y la creatividad. Juntos también produjeron The Big Picture: Rethinking Dyslexia (2012) y después Paper Tigers (2015). Este último documental cuanta la situación de un grupo de adolescentes con problemas de absentismo, conducta y abuso de sustancias gracias. Finalmente, Resiliece: The biology of stress and the Science of hope (2016), analiza los estudios médicos sobre cómo determinadas enfermedades cardíacas pueden estar relacionadas con experiencias traumáticas infantiles.
Pero tal vez la obra más impactante que produjo es The kidness of strangers, documental sobre los sacrificios de las familias de donantes de órganos inspirado por su propia experiencia a raíz de ser diagnosticado, en su época de estudiante, de una rara enfermedad autoinmune que afecta al hígado y por la que fue operado en varias ocasiones.
James Redford disfrutaba de la práctica del esquí, del surf, el ciclismo, el yoga y de la música de Olive and the Dirty Martinis, el grupo de versiones, desde Aretha hasta Zeppelin, en el que desde hacía años tocaba la guitarra. Será recordado como un ciudadano excepcional.