Los simpatizantes del presidente brasileño Jair Bolsonaro realizaron varias concentraciones el miércoles para pedir una intervención de las fuerzas armadas tras la elección de Luiz Inacio Lula da Silva, una medida que los expertos militares dicen que está descartada.
Por Rodrigo Schang
La autoridad electoral del país vecino dijo el domingo que Lula ganó casi el 51% de los votos. El presidente Jair Bolsonaro no ha reconocido oficialmente el resultado, aunque su gabinete ha iniciado una transición, en la que Lula asumirá la presidencia el 1 de enero.
Seguidores de Bolsonaro piden golpe militar contra Lula
Los partidarios de Bolsonaro en Sao Paulo y Río de Janeiro encabezaron mítines festivos el miércoles, llevando la bandera amarilla y verde de Brasil sobre sus hombros, tocando bocinas y coreando frases contra Lula.
“Esperamos que el ejército intervenga en esta situación, sabemos que esas elecciones fueron fraudulentas”, dijo Reinaldo da Silva, de 65 años, un jubilado del gobierno en una concentración a la entrada de un cuartel del ejército de Sao Paulo.
“He venido hoy porque quiero que Brasil sea libre, el socialismo no funciona con la nación brasileña”, agregó.
Se llevaron a cabo concentraciones similares en cuarteles de un total de nueve estados y en la capital, Brasilia, según el portal de medios de comunicación online brasileño UOL.
Los partidarios de Bolsonaro en Sao Paulo y Río de Janeiro encabezaron mítines festivos el miércoles, llevando la bandera amarilla y verde de Brasil sobre sus hombros, tocando bocinas y coreando frases contra Lula.
Jair Bolsonaro, un excapitán del ejército, ha cultivado fuertes lazos con los militares desde su elección en el 2018, ganándose las simpatías políticas de algunos de los altos mandos.
Al igual que muchos brasileños políticamente conservadores, a menudo se ha mostrado nostálgico de la dictadura militar de 1964-1985. Lula, por el contrario, fue encarcelado en la década de 1970 por protestar contra el gobierno militar.
Paulo Chagas, un general de caballería retirado que hizo campaña por Bolsonaro en el 2018, dijo en un mensaje a Reuters: “Los militares saben muy bien cuál es su deber: la Constitución no les permite intervenir en la política”.
Los simpatizantes del presidente brasileño Jair Bolsonaro celebraron el miércoles varias concentraciones para pedir una intervención de las fuerzas armadas tras la elección de Luiz Inacio Lula da Silva, una medida que los expertos militares dicen que está descartada.
El general Otavio Rego Barros, exportavoz de Bolsonaro, dijo en una columna publicada el miércoles que era hora de que los perdedores de las elecciones cedieran y pensaran en el futuro de Brasil. Criticó a los “grupos sin sentido de la responsabilidad que aún buscan desestabilizar un tejido social debilitado con provocaciones y desinformación.”
Chagas y Rego Barros se enemistaron con Bolsonaro por sus presiones a las fuerzas armadas para que lo respalden políticamente.
Miles de manifestantes se reunieron para pedir la intervención militar.
Antes de la votación del domingo, el actual presidente de Brasil había hecho repetidas afirmaciones de que el sistema electoral estaba abierto al fraude.
Además de hacerse eco de esa afirmación, algunos partidarios de Bolsonaro sostienen que no se debería haber permitido que Lula se presentara a las elecciones tras ser condenado como parte de un amplio escándalo de corrupción vinculado a su partido político, que fue extrañamente ‘anulado’ por el Tribunal Supremo el año pasado.
Personas de todas las edades salieron a las calles para mostrar su desacuerdo con las recientes elecciones brasileñas.
“Necesitamos una intervención federal, tenemos un Tribunal Supremo que se vendió al Partido de los Trabajadores”, dijo un manifestante en una concentración frente a una sede militar regional en el centro de Río de Janeiro.
Los camioneros, uno de los principales grupos de partidarios de Bolsonaro, bloquearon las carreteras de todo el país el lunes y el martes para protestar por los resultados.
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