Una ola de rumores circula por las redes sociales acusando a Khelif de ser una mujer trans y que por ello tendría una ventaja competitiva. Sin embargo, estas serían falsas acusaciones.

Por: María Sarca Antonio

En medio de la controversia y las acusaciones infundadas, la boxeadora argelina Imane Khelif ha sido objeto de un intenso escrutinio y acoso online. Las dudas y rumores sobre su identidad de género han levantado una ola de especulaciones que es necesario aclarar y poner en contexto.

Khelif clasificó a cuartos de final luego de que Carini abandonara el ring a los 46 segundos de combate.

Imane Khelif, nacida en Tiaret, Argelia, ha sido una boxeadora destacada desde joven, compitiendo en la categoría femenina de peso welter. Recientemente, durante su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024, Khelif se vio envuelta en una polémica cuando varios individuos y medios comenzaron a cuestionar su género. Sin embargo, es crucial subrayar que Khelif es una mujer cisgénero, es decir, una persona cuya identidad de género coincide con el sexo asignado al nacer.

La controversia se intensificó cuando ciertos comentaristas en las redes sociales y algunas figuras públicas comenzaron a llamarla «un hombre» debido a sus altos niveles de testosterona y la presencia de cromosomas XY, características de un desorden del desarrollo sexual. Esta situación no es única para Khelif; otros atletas han enfrentado cuestionamientos similares, incluyendo a Caster Semenya y Dutee Chand, quienes han sido objeto de pruebas de género debido a sus características físicas excepcionales.

Respaldo Institucional

Ella nació con una condición llamada hiperandrogenismo, un trastorno hormonal que se caracteriza por una mayor presencia de testosterona en el cuerpo. El Comité Olímpico Internacional (COI) y la Federación Internacional de Boxeo (IBA) han aclarado que Khelif cumple con todas las regulaciones y requisitos médicos necesarios para competir en la categoría femenina. En enero de 2024, el COI ratificó que Khelif es una mujer según su pasaporte y declaró que todos los atletas que compiten en París 2024 cumplen con las regulaciones de elegibilidad del evento.

«Todas las que compiten en la categoría de mujeres lo hacen cumpliendo las reglas de elegibilidad de la competición», afirmó el portavoz del COI, Mark Adam. Foto: AFP.

Además, el Comité Olímpico de Argelia (COA) ha defendido a Khelif, describiendo la reacción hacia ella como un «ataque sin ética» y «propaganda infundada». El COA ha tomado todas las medidas necesarias para proteger a Khelif y su derecho a competir en los Juegos Olímpicos, condenando el acoso y las falsas acusaciones que ha recibido.

Impacto y acoso online

El acoso online hacia Khelif ha sido particularmente intenso, con muchos usuarios en redes sociales cuestionando su género y lanzando insultos. Esta situación ha llevado a una reacción significativa de apoyo por parte de la comunidad deportiva y del público en general. Numerosas personas han destacado la injusticia de someter a Khelif a tal escrutinio simplemente por no encajar en ciertos estereotipos físicos de género.

Reflexión final

El caso de Imane Khelif pone de relieve la necesidad de una mayor comprensión y respeto hacia la diversidad física en el deporte. Es fundamental que las organizaciones deportivas y el público en general reconozcan y respeten las regulaciones establecidas por las autoridades competentes, que aseguran la equidad y justicia en las competencias.

Además, es crucial que la conversación sobre el género y la participación en el deporte se base en hechos y respeto, en lugar de prejuicios y desinformación. Imane Khelif es una atleta excepcional que merece ser celebrada por sus logros en el ring, no difamada por su identidad de género. La comunidad deportiva y el público deben unir esfuerzos para garantizar que todos los atletas puedan competir en un entorno libre de acoso y discriminación.


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