Aunque los estereotipos hablan de una generación despreocupada por su futuro y egocéntrica, los millennials también experimentan angustia frente a ciertas situaciones. Aquí las enumeramos.
1. Responder llamadas
Si desde que eres usuario activo de los servicios de mensajería instantánea como Whatsapp o Messenger, prefieres enviar mensajes de texto que llamar, formas parte del 75% de los millennials que se comporta así, según el OpenMarket. Dicho estudio reveló que teniendo la opción de comunicarse por escrito, siempre la encontrarán más conveniente. Aunque se trate de temas personales, como enviar condolencias, terminar una relación amorosa o felicitar a algún allegado por su cumpleaños.
Los motivos de este fenómeno son muchos: desde ahorrar tiempo hasta el hecho de registrar una conversación por escrito que facilite su recordación. Además de considerar esta forma de comunicación mucho menos disruptiva.
2. El matrimonio
¿Casarnos? Pero si aún somos muy jóvenes. La mayoría de millennials huye del compromiso y prefiere gozar de la libertad de conocer a más personas. Según la escritora científica Elizabeth Landau del blog Scientific American, esta generación es menos propensa a pasar por el altar en su segunda década de vida que sus predecesores.
Uno de los motivos que menciona la especialista es la proliferación de aplicaciones de citas, que conduce a la gente a pensar que tiene más opciones que antes. Evitan comprometerse porque saben que podrían estar perdiendo la oportunidad de conocer a alguien mejor. Además de querer estar absolutamente seguros cuando elijan a la persona con la que pasaran el resto de su vida.
3. Pedir vacaciones
De acuerdo con un estudio sobre hábitos laborales realizado por Allianz Travel Insurance, el 25% de los millennials aseguran sentirse nerviosos cuando piden días libres a sus jefes. Sus sentimientos suelen oscilar entre la culpabilidad, el miedo y la vergüenza. Otra investigación a cargo de la organización Project: Time Off sostiene que los pertenecientes a esta generación toman en promedio tres días menos de vacaciones al año (precisamente, por el miedo al ausentismo).
Pero hay más. Este temor que experimentan se extiende a otros espacios del trabajo. Así, les angustia excederse en sus pausas durante el almuerzo y sufrir las consecuencias.
4. La rutina
Sin embargo, esta generación también se caracteriza por cambiar de trabajo con cierta periodicidad. Ello responde a que padecen una aversión al aburrimiento. En cuanto inician su vida laboral, quieren continuar su aprendizaje y pasar por una y otra firma que aporte a su capital.
Además, con el paso del tiempo y la llegada de nuevas tecnologías, los millennials han encontrado nuevas formas de ganar dinero, sin necesidad de contar con un contrato en alguna empresa. Para ello, emplean sus propios recursos y todo aquello que está a su disposición. La flexibilidad horaria y el trabajo remoto son dos de los requerimientos de estos empleados.
5. Estar incomunicado
Se llama Nomofobia, proviene de la expresión en inglés no mobile phone phobia y es el temor a ser incapaz de comunicarse a través del celular u otro aparato tecnológico. Para una generación que pasa mucho más tiempo conectada a sus redes sociales y enviándose mensajes entre sí, este es un miedo fundamental y primario. No saber a cuántas personas les gustó su más reciente selfie en Instagram, incluso, puede provocar un temor mórbido que supera toda comprensión.
No obstante, esta fobia puede afectar tanto el bienestar mental como la vida social de quien la padece, perjudicando sus relaciones y capacidad para comunicarse con los demás en el mundo real.