¿HABLAS GRITANDO? Deja de hacerlo. Tampoco comentes en mayúsculas a menos que tu objetivo sea gritar y resultar molesto. Facebook, como todo espacio humano, tiene una serie de normas que nos aseguran una convivencia más feliz. Aquí un resumen de errores comunes, situaciones cotidianas y uno que otro desmán.
Hacer amigos
No hables con extraños
Hay cierta magia en conocer a alguien nuevo. Amistades que surgen, romance, intereses en común, hasta posibilidades de trabajo o proyectos. Sin embargo, recuerda que agregar a alguien en Facebook no es conocerlo. Es agregar a un extraño. Agregar a alguien que viste una vez está casi en este nivel.
¿Cuándo puedes hablarle a un extraño?
Lo ideal sería no agregar a gente que no conoces. Ahora, como en el mundo físico, hay situaciones que requieren que dos desconocidos se conecten. Algunas situaciones laborales, o eventos con amigos en común, por ejemplo. Escoge con sentido común.
¿Cuándo agregar a alguien?
Quién no ha agregado a alguien en la alegría de una fiesta, solo para preguntarse quién es esa persona al verla en su muro dos semanas después. Lo ideal es dejar que estas cosas sucedan naturalmente. No agregar a alguien apenas lo conoces, a menos que conocerse haya sido extraordinario para ambos y juntos hayan decidido mantener el contacto. El curso natural es hacerlo a partir de dos o más encuentros.
Amigos de trabajo
Nadie está obligado a agregar a nadie. Ni a su jefe, ni a aquellos con quien comparte espacio y funciones día tras día. Sin embargo, si tu jefe te agrega, lo ideal es aceptar. Recuerda que Facebook te permite ordenar tus contactos en círculos. Alguien puede ser tu amigo, sin tener total acceso a tu perfil.
Resumen: ¿Aceptar o no aceptar?
Aceptar: cuando conoces a la persona, cuando quieres conocer a la persona, cuando tienes amigos en común (especialmente en tu área de trabajo)
No aceptar: cuando no quieres aceptar.
Darte a conocer
Postéalo
Si te interesa o refleja quién eres. Cuando es algo que te gusta. Para llamar la atención sobre un asunto. Si no es ofensivo.
Novelas vía red
Si no lo gritarías por la calle, no lo postees. ¿Es la tercera cosa que piensas en postear en menos de una hora? No lo postées. ¿Es privado? No lo postées. No indirectas a tu ex, ni quejas sobre tu jefe o tu trabajo. Y menos comentarios negativos sobre tus amigos o ex amigos. Que tus palabras sean mejores que el silencio, o por lo menos más entretenidas.
Política
Pocas cosas tan brutales como las elecciones en Perú. Todos estamos conscientes de ello. Solo recuerda que puedes exponer tu punto sin insultar a nadie. Es posible hablar de tu candidato sin mencionar al del otro. Es posible enumerar las razones por las que no se debería votar por un candidato, sin insultar a aquellos de tus amigos que llevan su logo en la foto de perfil. La felicidad en época de elecciones no es una utopía (creemos).
Basta de suspenso
“Algo genial va a suceder, pero no puedo comentarlo”. Basta.
En relación con el otro
Etiquetar o no etiquetar
Ya lo dijo Jesús: no etiquetes en algo en lo que no te gustaría ser etiquetado. Es divertido burlarse de la desgracia ajena, pero intenta no perpetuar el ridículo en una red social, a la vista de todos con dos pulgares y un celular.
Spam
No, nadie quiere jugar a eso. Tampoco quieren seguir los posts cadena: nadie sale a su jardín y se siente como una fruta. O tal vez sí, pero no es contagioso.
En una relación con…
Facebook no es un universo mágico desconectado de la realidad, es directo reflejo de ella. Las cosas de pareja, se deciden en pareja. Hablar antes de cambiar el estado sentimental es básico. Dejar a alguien vía Facebook es cruel.
Likes
Likea o reacciona según quieras, pero ten en mente que abrir tu Facebook y ver que tienes 20 nuevos likes de la misma persona puede ser un poco estremecedor.
El paso de tiempo
¿Le diste like a una foto del 2009? Esas cosas pasan. Abraza el asunto y dale un par más de likes a cosas de hace siete años atrás.
Grupos
Lee las reglas del grupo antes de postear. No postées lo mismo mil veces. Nadie debería ser la persona que cuenta el chiste cinco veces porque sus amigos no se rieron. Así no funcionan los chistes.
Comenta, no trolées
That’s that.
