Y así ha sido desde su niñez. La doctora Liliana Príncipe Arnáez tenía solo 4 años cuando decidió ser médica, y 9 cuando se inclinó por la cirugía plástica. Este 2022 celebra quince años de trayectoria profesional, teniendo como objetivo principal ayudar a que sus pacientes recuperen su autoestima y transformen su vida con éxito.
Por Redacción COSAS
Un accidente que provocó una quemadura a su hermano menor, y en cuyas curaciones participó por propia iniciativa siendo aún una niña, marcó su destino. Los resultados del tratamiento la asombraron. No quedó cicatriz ni marca alguna. Decidió entonces que se dedicaría a reconstruir o corregir las imperfecciones de las personas. Había un plus: le gustaba pintar, dibujar, hacer escultura y joyería. Es decir, tenía manos mágicas.
Cuando a los 15 años anunció que estudiaría Medicina fuera del Perú, hubo una inicial oposición de sus padres, pero luego la apoyaron totalmente. Se fue a estudiar a México y volvió para hacer el internado y el SERUMS.
Su siguiente paso fue volar a Brasil, que en ese entonces era la cuna de la cirugía plástica, donde fue aceptada como alumna internacional por el famoso cirujano plástico Rodrigo D”Eça Neves, del Hospital Universitario de la UFSC, en Florianópolis, Brasil. Así, luego de siete años, cumplió su primer gran sueño: graduarse como cirujana plástica.
La doctora Príncipe celebra también el primer aniversario de su clínica, donde es directora médica. La inauguró hace un año con las más avanzadas tecnologías y personal de salud altamente calificado.
La primera cirugía
“Mi primera operación de cirugía estética, ya graduada, fue una cirugía de párpados a la mamá de un amigo. Fue maravilloso ver la sonrisa de la señora cuando se vio en el espejo. Esa sensación de ‘¡Lo logré!’ no te la quita nadie”, recuerda la doctora Príncipe. Los años pasaron y uno a uno ha ido cumpliendo los retos que se impuso.
En un campo donde la mayoría de cirujanos eran hombres, logró destacar. “Nunca me he creído con menos capacidades que un cirujano varón, pero ha sido un doble reto demostrarlo, sobre todo porque hice toda mi carrera en el extranjero”, nos dice satisfecha.
Ser madre: el segundo gran sueño
Y también lo cumplió. Es madre de dos niñas de 9 y 11 años. “Fue muy difícil. Tuve que hacerme tratamientos de fertilidad. Fueron embarazos de alto riesgo. Felizmente, he logrado organizar muy bien mis tiempos. Me levanto muy temprano para comenzar a trabajar mientras ellas están durmiendo. Así aprovecho el día, y cuando vuelven del colegio puedo ejercer tranquila mi rol de mamá”, nos cuenta.
Pronto anunciará novedades a través de sus redes sociales.
La clínica
El camino fue duro, pero cumplió este reto. Hace un año inauguró su clínica, donde es directora médica . “Comencé de cero, alquilando un consultorio, pero soñaba con tener uno propio, y lo logré hace tres años”, nos dice orgullosa. Su siguiente proyecto fue abrir un spa, pero lo impidió la pandemia.
Sin embargo, este año su spa médico, Crisalida by Dra. Liliana Príncipe, ya es una realidad. Allí atiende a pacientes que no son candidatos o tienen miedo a una cirugía. Cuenta con tratamientos de Láser CO2 fraccionado, con un equipo de alta gama, como lo es Alma Lasers. Con este equipo se tratan cicatrices, acné y estrías, y se realizan extraordinarios rejuvenecimientos faciales que hacen lucir a las pacientes cinco años más jóvenes.
También está su última adquisición, el equipo INDIBA, que contribuye a recuperar los tejidos de manera más rápida, haciendo los posoperatorios más cortos. Además, ayuda al tratamiento de la celulitis y a la reducción de medidas de una manera sorprendente.
Sus recomendaciones
“Siempre oriento a las personas para que no caigan en malas manos. Les aconsejo que verifiquen, a través del Colegio Médico del Perú, que el médico que las va a operar sea un especialista calificado. Asimismo, deben saber elegir una clínica certificada que cuente con todos los protocolos de bioseguridad, pues aún estamos en pandemia.
Y es indispensable que los pacientes pasen primero por una evaluación médica, ya sea virtual o presencial. Solo así se podrá determinar si hay factores de riesgo que puedan impedir un buen desenlace de la cirugía. En mi clínica, el personal de salud que acompaña todo el proceso de cada paciente, desde la primera llamada telefónica hasta que se va de alta, también está altamente calificado.
Siempre estamos innovando técnicas y sobre todo adquiriendo mucha tecnología para que el resultado final sea el mejor. Tenemos nuevos proyectos sobre los que ya les contaré más adelante a través de mis redes sociales. Este año se viene cargado de sorpresas”, finaliza la doctora Liliana Príncipe.
Contacto
Facebook: LilianaPrincipeCirugiaPlastica
Instagram: @dralilianaprincipe
Teléfono: 999 145 857
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