La colección cocreada por Olinda Silvano, la Asociación de Madres Artesanas Shinan Imabo y Alessandra Durand llegan a Manhattan con bordados, cantos kené y piezas que reflejan la cosmovisión amazónica del Perú

Por: María Jesús Sarca Antonio

El arte Shipibo-Konibo se instaló en el New York Fashion Week (NYFW) 2025 con “Amor Ancestral SS26”, colección del proyecto comunitario Kené Kaya. La propuesta reúne a la lideresa de Cantagallo y defensora del territorio amazónico, Olinda Silvano, la Asociación de Madres Artesanas Shinan Imabo y la investigadora y diseñadora Alessandra Durand.

Olinda Silvano y Alessandra Durand

Olinda Silvano y Alessandra Durand presentan en Nueva York la colección “Amor Ancestral SS26”, fruto del trabajo comunitario de Kené Kaya con artesanas shipibo-konibo.

La presentación abrió con cantos ícaros entonados por Olinda, transformando la pasarela en un ritual de conexión espiritual con el jaguar y la serpiente, deidades de la selva.

“El kené puede habitar la moda internacional con la misma fuerza y sofisticación que cualquier otra propuesta de alta costura”, afirmó Alessandra, fundadora de Kené Kaya, es egresada de Stanford y magíster en Desarrollo Sostenible por la Universidad de Oxford.

Kené Kaya

Las prendas de la colección “Amor Ancestral SS26”, elaboradas por artesanas Shipibo-Konibo, Awajún y creadoras de Madre de Dios, como muestra del arte textil peruano.

Olinda Silvano Kené Kaya

Olinda Silvano entona ícaros en shipibo-konibo durante su primera presentación en el New York Fashion Week, llevando la voz ancestral de la Amazonía a Manhattan.

Saberes ancestrales y moda sostenible

La colección integra textiles y accesorios elaborados por artesanas shipibo-konibo, awajún y creadoras de Madre de Dios, con técnicas tradicionales, tintes naturales y símbolos de sanación. Cada pieza constituye un testimonio vivo de la memoria cultural transmitida entre generaciones. “Amor Ancestral SS26” se nutre del interés y la pasión de Alessandra por la Amazonía peruana, que empezó hace 15 años, cuando realizó investigaciones en la selva sobre el impacto de las industrias extractivas y programas de responsabilidad social corporativa. Para ello, entrevistó a dirigentes indígenas y a la población local con el fin de comprender las condiciones de vida de las comunidades.

Para Alessandra, la experiencia marcó un antes y un después: “Estar con Olinda en New York Fashion Week fue profundamente significativo para la industria de la moda. Ella no solo es una de las maestras y artistas más reconocidas del arte kené, sino también es un símbolo no vivo de fuerza y resiliencia del pueblo shipibo-konibo”.

Kené Kaya

Los diseños de Kené Kaya fueron bordados a mano con iconografía amazónica.

La maestra Olinda llevó por primera vez a Nueva York su canto en lengua shipibo-konibo. “Para mí fue un honor representar a mi país, Perú, con el trabajo de Asociación de Madres Artesanas Shinan Imabo, juntos con Alessandra Durand. Es un honor estar acá en Nueva York para mí por primera vez y cantar en ese escenario, con nuestro idioma shipibo-konibo los cantos del kené”.

El colectivo Shinan Imabo continúa creando corbatas, vestidos y accesorios contemporáneos que, bordados con patrones geométricos y colores vivos, proyectan la fuerza espiritual de una identidad con más de tres mil años. «Poder compartir esta experiencia juntas, en una de las capitales de la moda mundial, refirma la importancia de que las culturas indígenas en nuestro país tengan representación en los grandes escenarios internacionales” dice Alessandra.

Olinda Silvano

Olinda Silvano es la única mujer indígena que llegó a la pasarela del New York Fashion Week con el proyecto Kené Kaya, como artista, diseñadora y cocreadora, marcando un contraste con la historia colonizadora y poco sostenible de la moda.

Voces desde Cantagallo

Kené Kaya es la síntesis de resiliencia y arte comunitario. La colección, creada por mujeres defensoras del territorio y preserva los saberes en la Casa Cultural Cantagallo, convierte al kené en un lenguaje visual capaz de transmitir espiritualidad, historia y resistencia. En este mismo espacio, la maestra Kené enseña teñido natural, bordado, pintura de murales y canto de ícaros.  “Su presencia demuestra que el arte ancestral no pertenece únicamente al pasado: está vivo, se reinventa y tiene un lugar legítimo en las pasarelas más importantes del mundo”, expresó Alessandra.

Olinda Silvano

Olinda Silvano participó en un evento de la UNESCO en París, donde representó al Perú como mujer originaria Shipibo-Konibo.

El 11 de septiembre, Olinda Silvano estuvo en París, en la sede de la UNESCO, durante la conferencia “Conocimientos indígenas y mercados mundiales: mejores prácticas para una colaboración ética”, organizada por la Delegación de Brasil y la Universidad del Lille con el apoyo de la Delegación del Perú, donde representó al país como mujer originaria shipibo-konibo. Días más tarde, viajó a Nueva York para presentar.

Además del impulso de Olinda, el arte amazónico viene recorriendo escenarios internacionales, como cuando en abril Los Mirlos llevaron su cumbia psicodélica a Coachella.

Después de estos encuentros, hoy llegó Olinda a Lima, donde sigue buscando fondos para mejorar la infraestructura de la Casa Cultural Cantagallo, ubicada en el asentamiento indígena amazónico del Rímac desde hace 21 años. La comunidad no cuenta con títulos de propiedad, por lo que, desde su rol como presidenta y activista, la artista solicita el apoyo: «Me gustaría que la presidenta Dina Boluarte nos ayude a facilitar las vías de solución, ya que las comunidades shipibo-konibo fueron reconocidas por el Ministerio de Cultura como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación. Exigimos que se reconozca nuestra importancia, accediendo a servicios básicos».

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