En uno de los momentos más intensos de la premiación del Oscar, la actriz Frances McDormand, ganadora de la estatuilla a Mejor Actriz, pidió a las mujeres presentes en la ceremonia pararse de sus asientos. Entonces miró a los hombres desde el escenario y dijo: “Todas tenemos historias que contar y proyectos que necesitan ser financiados”.
McDormand demandó que ellos deberían visitar sus oficinas o invitarlas a las suyas para hablar de todo los planes que podían desarrollar. Antes de despedirse, la protagonista de “Three Billboards Outside Ebbing, Missouri” señaló: “Tengo dos palabras que dejarles esta noche, damas y caballeros: ‘inclusion rider’”.
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Pero, ¿qué es “inclusion rider?
En resumen, es una forma de hacer de Hollywood un lugar más equitativo para todos. Cada vez que actores y actrices firman un contrato para rodar una película, tienen la posibilidad de negociar ciertas cláusulas. Una de ellas es una estipulación de tipo inclusiva. Es decir, el o la intérprete tiene la capacidad de exigir que el staff del filme esté integrado, de acuerdo a cifras demográficas, por una cantidad de trabajadores que sea proporcional a minorías raciales, mujeres, personas LGTB o gente con habilidades especiales.
De esta manera, la sociedad se vería reflejada dentro y fuera de las pantallas hollywoodenses. Este punto en el contrato requiere que el personal encargado de una producción de cine tenga al menos 50% de participación femenina, 40% de diversidad de grupos étnicos, 20% de personas con discapacidad y 5% de la comunidad homosexual.
A pesar de que ha ayudado mucho en su divulgación y el término se convirtió en trending topic luego de los Premios Oscar, Frances McDormand no es la creadora de esta iniciativa. Nació gracias a Stacy Smith, fundadora y directora de Annenberg Inclusion Initiative de la Universidad de Southern California. Ella, en conjunto Kalpana Kotagal, de la firma de abogados Cohen Milstein, entre otros colaboradores, idearon este proyecto. El propósito de esta cláusula de inclusión es «reducir sesgos al momento del casting, audición, entrevistas y procesos de contratación”, expresa Smith al diario The Washington Post.
Los autores del inclusion rider dan como ejemplo la película Black Panther, que ha tenido éxito comercial en las salas de cine a nivel mundial, trayéndose abajo la creencia de que un elenco de mayoría negra no sería capaz de lograrlo, según el mismo diario.
Por ahora, habrá que esperar cómo reacciona a esta nueva propuesta quienes toman las decisiones en Hollywood, una industria que en el 2017 solo tuvo 24% de personajes femeninos en las películas más taquilleras.