El padre de Meghan Markle está avergonzado por haber planeado fotos con un paparazzi en las que se lo ve supuestamente preparándose para la boda real de este sábado 19 de mayo. 

El padre de Meghan Markle, Thomas Markle, ya no acompañará a su hija hasta el altar de la Capilla de San Jorge, en el Castillo de Windsor, este sábado 19 de mayo cuando se case con el príncipe Harry, según le habría dicho él mismo al portal de noticias TMZ. 

La decisión se conoció luego de que se supiera que el padre de Meghan Markle pactó con un paparazzi para falsear fotos suyas supuestamente preparándose para el matrimonio entre su hija y príncipe Harry. 

El papá de Meghan Markle confesó que lo hizo porque los paparazzi siempre lo sorprendían en situaciones poco favorables, como comprando cerveza (que no era para él, según dijo a TMZ) o vestido de forma desaliñada. Thomas Markle pensó, entonces, que unas fotos posadas podrían ayudarlo a reconstruir su imagen. Precisó que su intención no fue principalmente monetaria y que no quiso perjudicar a la familia del príncipe Harry. 

Según TMZ, el padre de Meghan Markle admitió que las fotos se ven «estúpidas y exageradas», y que ahora se arrepiente de haber aceptado el trato con el paparazzi.

Contó, además, que desde que Meghan Markle mantiene una relación romántica con el príncipe Harry, las agencias de medios le han ofrecido entre US$50,000 (S/163,000) y US$100,000 (S/325,000) por entrevistas, pero que las ha rechazado todas. Por estas últimas fotos posadas dijo que no le ofrecieron ninguna cifra cercana a los US$100,000, como ha venido especulando la prensa. No indicó cuánto le pagaron. 

El padre de Meghan Markle reveló también que hace seis días sufrió un ataque al corazón, pero que salió del hospital para poder ir a la boda de su hija con el príncipe Harry. Sin embargo, tras este incidente, ha decidido no ir para no avergonzar a su hija ni a la familia real. 

Se tenía previsto que el padre de Meghan Markle lleve a su hija al altar el día de su matrimonio. Su madre la acompañará hasta la Capilla de San Jorge y tendrá un «papel importante» durante la boda real. 

Hasta el momento, ni el Palacio de Kensington ni Meghan Markle se han pronunciado sobre el incidente, por lo que no se sabe quién acompañará a la novia hasta el altar.